(ANSA) - VENECIA, por Francesco Gallo - Nunca se habían visto tantas escenas inocentes, infantiles y de puro sexo en el Lido. ¡Y esto en "Poor Things!" ("Pobres Criaturas!") de Yorgos Lanthimos, en carrera por el León de Oro, cuenta una historia difícil, protagonizada por Bella Baxter (una Emma Stone casi siempre desnuda), una mujer resucitada con un cerebro de niña que la convierte en "una mujer bastante retrasada" (como la describen).
Sin embargo un ser puro que descubre la sexualidad de forma natural, que no sabe nada de convenciones y reglas. Y por eso se toca en cuanto puede porque es precioso y se acuesta con todos con la ilusión de una niña en una juguetería.
Quién creó este monstruo? No es casualidad que él también sea un monstruo, un científico loco que se parece a Frankenstein y cuyo nombre ya demuestra su vocación de creador: Godwin (interpretado por Willem Dafoe).
Para él Bella es sólo un experimento, uno de los muchos rompecabezas que le encanta componer de hombres y animales.
Anhelando la mundanalidad y la vida, Bella decide en un momento huir junto con Duncan Wedderburn (Mark Ruffalo), un abogado rico y disoluto.
Pero las aventuras ciertamente no terminan aquí para ella, que tuvo la suerte de empezar de cero la posibilidad de revisar la relación entre los sexos y llegar a odiar todas las formas de desigualdad en nombre de su plena emancipación.
La película, ambientada a principios del siglo XX, está basada en la novela 'Poor Things' del escritor escocés Alasdai Gray. "Es ciertamente una película difícil de describir - explica hoy Yorgos Lanthimos en el Lido -. Tuve que cambiar en muchos puntos la estructura de la novela, que es un ensayo más político y centrarme más en el punto de vista de Emma, ;;en su viaje por el mundo".
Una conexión con el hoy? "Creo que es un tema muy contemporáneo porque hablamos de la libertad, del papel de la mujer y obviamente de la relación entre los sexos. Las cosas no han cambiado mucho desde la época de la novela, que es de 1922, aparte de la ambientación gótica de Emma, que interpreta una mente libre que siempre está experimentando", afirma el director.
Finalmente, para realizar las escenas de sexo, explica Lanthimos, "contamos con un coordinador de intimidad. Su profesionalidad marcó la diferencia, tranquilizó a los actores, creando una atmósfera confortable".
Además, muchas escenas no estaban preparadas al detalle, añade Lanthimos, que en 2018, precisamente en Venecia, presentó su último trabajo, "The Favourite", también con Emma Stone, ganando el Gran Premio del Jurado: "No había ningún guión para las escenas de sexo, pero simplemente nos sentamos allí y dijimos qué faltaba para que fuera lo suficientemente realista.
Era importante para todos nosotros ser parte de la película, no avergonzarnos y no dar marcha atrás". (ANSA).