Se trata de un entorno preservado en un caso tan excepcional como los otros dos descubiertos en el mismo sector con los lechos de los esclavos, donde fue posible realizar vaciados de muebles y otros objetos de materiales perecederos como madera, telas y cuerdas.
La técnica del vaciado, probada sistemáticamente desde 1863 con la creación de los primeros vaciados de las víctimas de la erupción del Vesubio en el año 79 d.C., es única en el mundo porque es el resultado de la dinámica específica del acontecimiento catastrófico: personas u objetos abrumados y cubiertos de la "corriente piroclástica", una nube ardiente de cenizas y gases tóxicos, permanecieron allí durante siglos.
Pero mientras la ceniza se solidificaba, formando una capa muy sólida conocida como "cinerita" -se lee en una nota del Parque de Pompeya-, el material orgánico como cuerpos humanos, animales u objetos de madera se descomponía, dejando un vacío en el suelo.
Estos huecos se pueden rellenar con yeso durante la excavación, para recuperar la forma original de la impresión "negativa". Una técnica que dio resultados extraordinarios en la villa de Civita Giuliana, desde los moldes de dos víctimas y un caballo hasta los de las modestas camas del barrio servil.
En la habitación hay una cama, pero también herramientas de trabajo y lo que parece ser un armazón, quizás de otra cama, desmantelado: también se pueden reconocer cestas, una cuerda larga, trozos de madera y una sierra con hoja, que no parece tan diferente de las sierras tradicionales utilizadas hasta hace poco.
Incluso se identificó un trozo de cuerda, también como una huella bajo tierra, que la mantuvo bajo tensión.
La actual financiación de la excavación está llegando a su fin, pero el Parque y la Fiscalía anunciaron que tienen intención de continuar las investigaciones, recurriendo a la financiación de una campaña de excavación prevista en la Ley de Presupuesto por el Ministro de Cultura, Gennaro. Sangiuliano, que el lunes acudió a Pompeya para una inspección. También porque todavía quedan muchos puntos por aclarar en Civita Giuliana, no solo a nivel científico, sino también a nivel jurídico. (ANSA).
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