"Soy un diseñador que mira la vida real, me gusta la ropa que dura y se fusiona con la gente, no la de la alfombra roja", comenzó De Sarno, explicando que había elegido la Trienal precisamente como símbolo del encuentro entre las personas "a quienes he puesto en el centro de mi trabajo desde el primer día en Gucci".
Gucci es una firma italiana de productos de lujo con sede en Florencia, fundada en 1921 por Guccio Gucci (1881-1953) "Hago este trabajo desde hace 20 años, me interesan los tejidos, los colores, los volúmenes, cuido las cosas, me gusta - explica - que la gente vea que hay sustancia en mi ropa, porque soy muy profundo y me siento libre cuando los pensamientos coinciden con las palabras. Quiero ser conocido, como mi ropa, más allá de los 18 minutos del espectáculo".
La suya, de hecho, en comparación con la de su predecesor, Alessandro Michele -que acaba de publicar en Ig un par de avances de su visión de Valentino, donde llegó como director creativo en lugar de Pierpaolo Piccioli, del que De Sarno era la mano derecha- "es una moda hecha no de declaraciones sino de detalles", incluso cuando habla muy claro, como la colección masculina del próximo verano. La inspiración proviene de "Días Salvajes. Una vida sobre las olas", de William Finnegan, las memorias que el reportero de guerra neoyorquino compuso recorriendo las etapas de una vida dedicada a un desafío muy personal al Dios océano.
Ni tablas en la pasarela ni citas explícitas: "del surf obtuve libertad e intención, el libro - dice De Sarno - te hace querer encontrar algo con lo que ser libre".
Para él, el desafío es una nueva interpretación de la ropa formal, como las chaquetas de popelín ultra entalladas pero trabajadas como una camisa para combinar con pantalones rectos o shorts y los nuevos botines cuya forma recuerda a un delfín.
El cetáceo regresa entre los estampados de temporada junto con imágenes de surf, flores de hibisco y hojas de plátano, pero también como cremallera en el abrigo cruzado de cuero verde lima forrado con neoprene.
Chaquetas cruzadas o sencillas, camisas de alta costura en piel bordadas o estampadas para combinar con shorts de nailon, piel y faya de seda, para llevar con zapatos de surf y los nuevos bolsos 'puffy' de cuero plastificado.
Para la noche, chaquetas con flecos que se mueven como ondas y camisetas de lentejuelas rosas. Para todo, solo un dictado: "Quiero verte en Gucci, no a Gucci sobre tí", concluye De Sarno.
(ANSA).
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