(ANSA) - MELBOURNE, 30 MAR - El bicampeón neerlandés Max
Verstappen reveló que aún padece el malestar estomacal con el
que escoltó en el Gran Premio de Arabia Saudita a su compañero
mexicano Sergio Pérez, quien buscará repetir en Australia, donde
Ferrari busca de una vez por todas su reivindicación.
Verstappen contó que "apenas podía caminar" antes de la carrera
desarrollada en el circuito de Yeda el pasado domingo 19, cuando
Pérez se quedó con la victoria antecediendo al neerlandés y al
español Fernando Alonso, quien escoltó con su Aston Martin a los
dos Red Bull.
"Cuando llegué (a Yeda), pensé que el problema había pasado,
pero en cuanto me subí al auto para la primera sesión de pruebas
libres, después de una vuelta me costaba respirar normalmente",
narró Verstappen en rueda de prensa.
"Por eso me sentí mal todo el fin de semana. Fue una de las
primeras carreras en las que me sentí condicionado físicamente y
fue muy frustrante", reconoció el neerlandés, quien apostó por
recuperarse "al 100%" tras la pausa de cuatro semanas posterior
al GP de Australia.
Igualmente, Verstappen lidera la temporada 2023 con 44 puntos,
uno más que Pérez, mientras que Alonso completa el podio con 30
unidades, diez más que el también español Carlos Sáinz (Ferrari)
y el británico George Russell (Mercedes).
"Esta pista me gusta, aunque no siempre hayamos logrado grandes
resultados", admitió Verstappen de cara a la cita en el Albert
Park de Melbourne, donde Red Bull buscará revalidar la
supremacía demostrada en Bahrein y Arabia Saudita.
"En otro momento de la temporada iríamos mejor en esta pista. El
año pasado entendimos dónde fallamos en términos de
configuración y estabilidad, dando un gran paso adelante justo
después de Melbourne", recordó Verstappen.
Muy diferente es el panorama en Ferrari, que llegará a Melbourne
con la obligación de ubicarse en los puestos de vanguardia para
que Sáinz y su compañero monegasco Charles Leclerc puedan pensar
en pelear por el título de pilotos esquivo desde 2007.
"Cuando alguien tiene la ventaja de Red Bull, debe decir que es
un poco un problema de concepto", consideró Sáinz ante el diario
español Marca sobre el plan de Ferrari de mejorar la
aerodinámica del modelo SF-23.
"Red Bull lo adivinó y nosotros no. Creo que nos hemos dejado
llevar un poco por el coche del año pasado, porque era muy
rápido a una vuelta. Pero al final del año pasado ya se veía que
en carrera estábamos un paso por detrás de Red Bull", concedió
Sáinz.
"Y este año, con el cambio de reglamentación (más altura al
suelo de todos los coches, Ndr), quizá eso le haya hecho más
daño a nuestro coche y haya que empezar a mirar hacia otro
lado", agregó el español, quien estima recién para el GP de Bakú
(cuarta cita del año) un cambio notorio en los autos de Ferrari.
Pese al trabajo en la sede de Maranello, el español desestimó
resultados corto plazo de Ferrari: "esto lo hemos visto en las
tres últimas semanas. Primero hay que analizarlo y otra cosa es
empezar a probar en el túnel de viento", advirtió.
"Otra empezar a fabricar las piezas y otra es poder llevarlo a
la carrera. Tenemos claro que no va a ser una solución de una o
dos carreras o uno o dos meses. Esto va a llevar tiempo",
insistió Sáinz, quien igualmente pidió "paciencia".
"Tenemos los recursos para mejorar. El auto es realmente
difícil, debemos hallar el camino intermedio para lograr dos
décimas en la clasificación y ocho en la carrera", indicó Sáinz,
quien consideró que Red Bull "es fuerte en su totalidad".
En igual sentido se expresó Leclerc, que marcha octavo con
apenas 6 unidades en el Mundial 2023 tras su abandono en Bahrein
y su séptimo puesto en Arabia Saudita, donde escoltó justamente
a Sáinz.
"No sólo no tenemos el auto del año pasado, sino que dimos un
paso atrás en la actuación y no puedo decir que aquí será fácil
ganar. De seguro no tenemos las armas para hacerlo", adelantó
Leclerc.
"Aquí no tendremos novedades, pero estamos trabajando para
mostrarlas después de Australia y volver a estar cerca de Red
Bul. Pero mi objetivo de este año no cambió, quiero el Mundial",
aclaró el monegasco.
"No espero milagros este fin de semana. El auto es distinto al
del año pasado. En la clasificación siempre vamos bien, en la
carrera nuestro auto tiene más problemas", reiteró Leclec.
"Creo que estaremos cerca en la clasificación, pero creo que la
carrera será igual a las otras. Hay mucho por trabajar para
acercarse a Red Bull", concluyó el monegasco, que ganó el GP de
Australia del Mundial 2022, en el que fue subcampeón de
Verstappen. (ANSA).
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