(ANSA) - PARIS, 4 MAY - París Saint-Germain reforzó la seguridad en el centro deportivo de Camp des Loges, donde se entrena el plantel, así como en las viviendas de algunos de sus jugadores debido a las amenazas lanzadas por parte de los fanáticos más radicalizados del club parisino.
En la mira de estos últimos están el astro argentino Lionel Messi, el brasileño Neymar y el italiano Marco Verratti, aunque en cada caso por distintos motivos que enrarecieron el clima en torno al plantel de Chtistophe Galtier, otro de los apuntados por los aficionados.
Messi fue sancionado por haberse ausentado a la práctica ordenada por el entrenador tras la derrota con Lorient en la Ligue 1, debido a que viajó a Arabia Saudita por compromisos comerciales.
La dirigencia del PSG optó por marginarlo del plantel (con el cual no puede siquiera entrenarse por el lapso de dos semanas) al aducir que viajó sin permiso.
Sin embargo, la prensa española aseguró en la víspera que eso no es cierto, que el campeón mundial había postergado dos veces el viaje y que, cuando finalmente lo concretó, contaba con la autorización de la dirigencia.
Muchos consideran que esa sanción es producto del fastidio que habría generado el supuesto rechazo de Messi a extender el contrato con el club que caduca al final de la actual temporada.
En lo que refiere a Neymar, al brasileño le reprochan el haberse lesionado y quedar al margen del plantel por el resto de la temporada y pidieron por su salida.
Un grupo de fanáticos que protestó en la víspera frente a la sede del club parisino, al parecer intentó llegar hasta la vivienda del astro brasileño, lo que obligó a las autoridades del PSG a reforzar la seguridad en torno a la misma.
El delantero echó más leña al fuego al publicar un posteo en Instagram que decía: "No dejes que la gente te arrastre a su tormenta, llévalos a tu paz".
Un mensaje que pareció generar el efecto inverso al que Neymar pretendía entre los aficionados que también cuestionan a Messi y a Verratti, este último por haber regresado con sobrepeso de las vacaciones tras el Mundial de Qatar.
Verratti jugó sólo dos partidos antes de lesionarse para algunos como consecuencia de ese sobrepeso, razón por la cual no volvió al ruedo desde hace tres semanas.
Frente a la tensa situación, el club salió a aclarar hoy con un comunicado que "condena con la mayor firmeza los actos ofensivos e intolerables de un pequeño grupo de individuos".
El Colectivo Ultras París respondió con otro que dice: "Estamos realmente preocupados por el futuro de nuestro club" y se preguntan: "¿Hay alguien aún conduciendo esto?" (ANSA).
Amenazas contra Messi, Neymar y Verratti
Refuerzan protección en centro de entrenamiento y en domicilios de jugadores