(ANSA) - ROMA, por Alessandra Magliaro - La discapacidad, ya sea temporal o definitiva, grave o leve, no debe ser impedimento para tener una vida plena y una sociedad se dice civilizada solo si hace todo para ser inclusiva. Además de áreas como el diseño, la moda, el maquillaje o las innovaciones tecnológicas, también el tiempo libre debe ser inclusivo.
En cuanto al esquí, en la actualidad no son muchas las estaciones que lo cumplen, con maestros formados, tecnología o medios específicos como sillas de ruedas, que son una especie de trineos montados en esquís.
Y no se trata solo de circuitos para competiciones, sino de pistas para los fines de semana o semanas blancas, vacaciones adaptadas a discapacitados visuales, de pie o sentados según las categorías de esquí alpino.
La Fisdir Ski Race Cup es el primer circuito nacional de esquí alpino dedicado a los atletas con discapacidad intelectual.
Nació con la idea de que para un discapacitado intelectual el esquí alpino es un instrumento extraordinario para crear energía positiva.
Arrancó los días 20 y 21 de enero de 2024 en Sestriere (Turín) y atravesó lugares como Tarvisio (Udine) y Folgaria (Trento), y culminará en la gran final en el Passo del Tonale (Trentino Alto Adige) los próximos 23 y 24 de marzo.
Mirando a otros países, Francia tiene una gran cultura respecto a la discapacidad, sobre todo en deportes invernales: en Grand Massif Samoëns Morillon, en alta Savoia, hay una estructura famosa que existe desde hace 50 años.
La sección de la escuela Esf dedicada al Handski, en colaboración con la asociación Samöens Handi-glisse, ofrece gratuitamente los equipos necesarios y tiene cursos para personas con discapacidad.
La doctora Adelia Lucattini, psiquiatra y psicoanalista de la Sociedad psicoanalítica italiana, cuenta los beneficios del esquí: "Aumenta la conciencia de uno mismo y del cuerpo, la propiocepción, la coordinación, el saberse mover con un equipo encima, y trabaja todo el cuerpo, no solo las piernas y pies".
A nivel psicológico, "la distinta perspectiva desde la que se miran las cosas, abrazar las montañas y los valles con la mirada, orienta las perspectivas mentales, amplía las visiones y acostumbra a la diversidad y a la complejidad". (ANSA).
Esquí inclusivo, montaña y nieve para todos
Lanzan el primer circuito nacional para discapacitados