(ANSA) - ROMA, 6 ABR - "Ganar el clásico siempre es hermoso, pero ganarlo como entrenador es algo distinto", reconoció Daniele De Rossi, quien celebró el 1-0 de la Roma frente a Lazio en su primer derby desde que tomó las riendas del equipo "giallorosso".
"Sentíamos la presión porque había una expectativa enorme en torno a este partido, esa de los mejores tiempos", reconoció el ex capitán y símbolo de una Roma que volvió a cantar victoria frente al histórico rival después de mucho tiempo.
"Estoy muy feliz", confesó De Rossi, al explicar que "vivir un clásico como entrenador genera una tensión emocional mayor" y al considerar justo el desahogo junto con sus dirigidos, que celebraron con él frente a la Curva Sur del Estadio Olímpico con sus aficionados al final de un clásico caliente.
"Cuando se gana, un poco de festejo siempre es sano. Me arrastraron hasta allá mis jugadores, aunque ese era su momento, pero disfruté mucho también yo de los abrazos", reconoció el entrenador, que parece haberle cambiado la mentalidad a la Roma desde que reemplazó al portugués José Mourinho.
Su equipo sumó tres puntos fundamentales y quedó a dos de distancia, con un partido más, que Bologna, hoy por hoy cuarto y último clasificado a la próxima Champions.
Muchos afirman que lograr el boleto al torneo continental o celebrar en la Europa League (Roma jugará con Milan por el pasaje a las semifinales de la actual edición) garantizarían la continuidad de De Rossi al frente del plantel.
"Por ahora soy el técnico presente. No estoy pensando en el futuro", respondió, al explicar que "cada tanto, también es necesario tirarse en el sofá con una cerveza y un paquete de patatas fritas y relajarse".
De Rossi consideró que Roma logró compensar hoy lo que no había podido lograr en el empate previo frente a Lecce: "En ese partido, se nos escapó el triunfo porque yo soy un técnico joven que todavía tiene cosas que aprender", dijo asumiendo la responsabilidad.
"Soy un agradecido por esta oportunidad de entrenar a la Roma que me cayó del cielo y que representa una oportunidad única. No sólo a nivel emocional, sino porque tengo la posibilidad de entrenar a jugadores talentosos que disimulan mi inexperiencia.
Gracias a ellos, me estoy haciendo famoso", explicó. (ANSA).
"Ganarlo como DT es distinto", De Rossi
Que celebró el primero con Roma en esa función