El fiscal Giovanni Roteglia, según pudo confirmar ANSA, objeta la realización sin autorización de una excavación transversal a la lengua del glaciar de 330 metros de largo y ocho metros de ancho.
Roteglia apunta contra Federico Maquignaz, presidente y administrador delegado de la Cervino spa, empresa responsable de las pistas italianas; contra su predecesor, Herbert Tovagliari; contra el operador de la pala mecánica qie realizó la excavación y contra el suizo Franz Julen, titular del comité organizador.
Según la investigación, se trata de una vía de conexión entre la pista principal y el glaciar Plateau Rosá, que no está incluida en los proyectos autorizados.
Se impugna a partir del artículo 181 del Código de bienes culturales y del paisaje, o sea, "Obras realizadas en ausencia de autorización o en deformidad de ella".
Maquignaz, Tovagliari y el operador de la pala mecánica son defendidos por el abogado Corrado Bellora, mientras que Franz Julen - también presidente de la empresa de remontes mecánicos de Zermatt (Zermatt Bergbahnen) - es asistido por Federico Fornoni, ambos del foro de Aosta.
"Rechazamos todos los cargos, creemos que hemos operado en pleno cumplimiento de la ley", aseguró Bellora tras el cierre de la investigación sobre las obras dela pista.
La investigación, desarrollada por el Cuerpo Forestal del Valle de Aosta, comenzó por iniciativa de la misma fiscalía, dirigida por el fiscal Luca Ceccanti, tras la noticia, en el otoño boreal de 2023, de la polémica sobre las obras en el lado suizo de la ruta, donde tienen jurisdicción las autoridades helvéticas.
El recorrido "Gran Becca" comienza a 3.720 metros sobre el nivel del mar en Gobba di Rollin, al otro lado de la frontera, y alcanza los 2.835 metros en los lagos de Cime Bianche, con un recorrido en su mayor parte sobre un glaciar y dos tercios en territorio italiano.
Programados para dos años consecutivos, los descensos libres masculinos y femeninos por la Gran Becca nunca se cumplieron: en el otoño boreal de 2022 por la falta de nieve, al año siguiente - aplazados un par de semanas - por el exceso de nieve y los fuertes vientos.
Las competencias quedaron al margen del calendario 2024 de la federación internacional de esquí alpino.
En Suiza, la denuncia de algunas asociaciones medioambientales provocó la paralización parcial de algunas obras en el otoño boreal de 2023.
El comité organizador había asegurado que planeaba proceder "con las correcciones necesarias, dejando el recorrido inalterado desde el punto de vista deportivo". (ANSA).
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