"Mi carrera competitiva termina y comienza la del otro lado de la valla, a pequeños pasos, con todas las ganas de dar lo mejor a los demás y crecer junto a ellos, con dedicación, estudio y la mayor atención posible, siempre al servicio de Fiamme Oro", publicó Centracchio en redes sociales, donde confirmó que iniciará su camino como entrenadora.
"Pasó un tiempo, tres años para ser exactos, desde mi última vez en el tatami de competencia, tres años desde que cumplí mi mayor sueño, irme de Tokio con una medalla olímpica al cuello", subrayó la atleta "azzurra".
"A partir de ese momento, muchas cosas han tomado una forma diferente: entre ellas, el judo siempre ha sido mi pasión y mi principal objetivo, pero la forma de vivirlo ha cambiado", explicó.
"Sigo queriendo lograr algo importante a través del judo, pero algo menos tangible, menos evidente. No se trata de títulos o medallas, no se trata de mí personalmente: se trata de ver los ojos felices y satisfechos de un atleta que progresa, crece y logra sus objetivos, también gracias a mi ayuda al saber que soy un punto de referencia para quienes quieren llegar a la cima para brindarles a estas personas aquellas cosas que a mí me han faltado y que aprendí a encontrar y gestionar por mi cuenta", agregó Centracchio.
Asimismo, la judoca agradeció a quienes "día a día me permiten creer en la belleza de esta misión y que, sin saberlo, con su confianza y dedicación me dan la alegría de soñar, incluso cuando no es fácil".
"Como deportista he aprendido que a las únicas personas a las que debemos convencer de nuestro valor somos nosotros mismos, que trabajar con corazón e inteligencia, tarde o temprano, siempre trae algo bueno y que los hechos hablan mejor que cualquier otra cosa; así que, siempre con los hechos, espero construir algo hermoso para el camino que viene", concluyó Centracchio. (ANSA).
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