Deportes

Bologna casi amarga a su ex DT

La Juventus de Thiago Motta empató con el último aliento, mantuvo su invicto, pero se retiró silbada

Bologna le dio un susto a Juventus

Redazione Ansa

   (ANSA) - TURIN, 7 DIC - Un gol en tiempo adicionado le permitió a Juventus sumar al menos un punto en un partido que los dirigidos por Thiago Motta perdían como locales por 2-0 frente al Bologna, equipo que realizó una gran campaña en la pasada temporada al mando del técnico ítalo-brasileño, al que hoy le dio un susto en Turín en la decimoquinta fecha del campeonato.
    El sueco Dan Ndoye a los 30' y Tommaso Pobega a los 52' convirtieron los goles del "azulgrana" que actualmente entrena Vincenzo Italiano, pero el neerlandés Teun Koopmeiners a los 62' y el belga Samuel Mbangula, que ingresó a los 80' en reemplazo del estadounidense Timothy Weah, en el segundo minuto adicionado le permitieron a la "Vecchia Signora" mantenerse como único invicto del torneo.
    Ese quizás fue el único motivo para festejar que tuvieron hoy los fanáticos de una Juventus que sumó su noveno empate en el campeonato (ganó sus restantes seis partidos), pero que si bien se mantiene en el sexto puesto ahora con 27 unidades, se sigue alejando de los rivales que pelean por el título, empezando por Atalanta, que manda con 34 puntos tras vencer por 2-1 a Milan el viernes.
    Con 22 quedó Bologna, que tiene los mismos que Milan (con el cual debe disputar un partido postergado en su momento por las inundaciones) y la precede por mejor diferencia en la tabla, ambos por detrás de Juventus y a cinco puntos de distancia también de Udinese, que marcha por detrás de los dos.
    De cara al choque que animará el miércoles en Turín por la antepenúltima fecha de la fase de Liga de la Champions ante el alicaído Manchester City (último campeón de ese torneo), torneo en el que ambos marchan en zona de clasificación a un repechaje por un pasaje a los octavos de final, el empate agónico frente a Bologna le permite a Juventus encarar con mejor ánimo ese próximo duelo.
    Diametralmente opuestos los ánimos en el equipo de Italiano, que sumó apenas un punto en cinco partidos disputados en el torneo continental que disputa tras aquella gran campaña al mando de Motta, pensando en el duelo que animará también el miércoles, pero como visitante de un Benfica, al que necesita derrotar para mantener alguna aspiración de jugar al menos un desempate.
    Más aún cuando parecía tener hoy todo "cocinado" en el Allianz Stadium frente a una Juventus que parece haberse olvidado lo que es ganar y que empató por cuarta fecha consecutiva, esta vez sólo por la irrupción en escena de Mbangula para salvarla del incendio en la agonía del partido arbitrado por Matteo Marchetti.
    Ni siquiera la presencia como titular del serbio Dusan Vlahovic, recuperado de una lesión, le permitió al equipo turinés reencontrarse con el triunfo ante un Bologna que no contó, en cambio, con el lesionado Riccardo Orsolini y que presentó como único delantero neto al argentino Santiago Castro, secundado por Ndoye y por su compatriota Benjamín Domínguez.
    Tampoco bastó en Juventus la presencia, como espectador en este caso, de un ídolo de la casa como Alex Del Piero, recibido con afecto por el público que luego sufriría con la actuación del equipo hasta el último suspiro y desde prácticamente el inicio, cuando Andrea Cambiasso debió dejar la cancha a los 4' de juego por una lesión en el tobillo.
    Un remate en el poste de Ndoye mantuvo alta la tensión y refrendó que Bologna no viajó a Turín para cumplir el simple papel de "partenaire" en una "película" en la que el árbitro Marchetti adoptó el papel de villano al considerar regular un contacto entre el francés Pierre Kalulu y el danés Jens Odgaard tras revisar la jugada en el VAR, ganándose algunos silbidos, que no serían los únicos.
    El resto del libreto siguió siendo el mismo y Bologna volvió a llegar con peligro con un tiro libre del español Juan Miranda que se desvió en Weah a los 19'. Los fanáticos de Juventus estaban por entonces entretenidos con cantos irónicos en los que le pedían a Urbano Cairo no dejar de ser presidente del Torino, clásico rival que perdió 24 de los 31 derbys disputados bajo su gestión.
    Bologna, en cambio, lucía concentrado y tras una trepada de Emil Holm por el carril derecho, el balón derivó en Ndoye y este, con un potente derechazo que no le dio opciones a Mattia Perin (sin responsabilidad en la apertura del marcador) despabiló al público local y pareció despertar a Juventus de su letargo.
    El local respondió con un "penal en movimiento" ejecutado por Nicoló Fagioli que terminó en la tribuna y con un remate más ajustado de Vlahovic que conjuró el arquero polaco Lukasz Skoruspki y que no bastó para acallar los silbidos con los que los aficionados de Juventus despidieron al equipo camino al descanso.
    Sin cambios regresaron Juventus y Bologna del intervalo, tras lo cual se jugaban apenas seis minutos cuando un reclamo de Motta contra Marchetti obligó al árbitro a amonestarlo y luego a expulsarlo porque persistía en su reproche.
    Sin él en cancha, Pobega estiró la ventaja del visitante tras un pase de taco de Castro que le permitió el ex jugador de Turín sorprender a Perin cuando intentaba achicar, gol que pareció colmar la paciencia del público de Juventus, que le reclamó "actitud" a sus jugadores y al parecer entendieron.
    Diez minutos después, Koopmeiners celebraba su primer gol con la casaca "blanquinegra", pero Juventus debería esperar a la irrupción en escena de Mbangula cuando se moría el partido y el belga, asistido por Vlahovic, conectó un derechazo que bastó al menos para evitar el incendio, pero no para que celebren los fanáticos, decepcionados porque su equipo cada vez se aleja más de la pelea por el "scudetto". (ANSA).
   

Leggi l'articolo completo su ANSA.it