Embajadas

Venezuela: Hospital italiano, desvinculado

Por cambio en el estatuto, que "compromete sus fines", dice Embajada

La embajada de Italia en Caracas anunció oficialmente hoy que todas las instituciones que representan a la comunidad italiana están completamente "desvinculadas y desconectadas" de la fundación del hospital italiano en Venezuela.

Redazione Ansa

(ANSA) - La embajada de Italia en Caracas anunció oficialmente hoy que todas las instituciones que representan a la comunidad italiana están completamente "desvinculadas y desconectadas" de la fundación del hospital italiano en Venezuela. La decisión se tomó, según un comunicado, luego de que el Consejo de Gobierno de la Fundación Hospital Italiano de Venezuela, designado por el Comité Promotor el 26 de octubre de 2021, sin haber consultado al propio Comité Promotor, la embajada y el consulado general en Caracas, realizó cambios extraordinarios en el Estatuto, que comprometen irreparablemente sus fines".

     Entre otras cosas, el nuevo estatuto recoge que "se suprime la existencia de la Asamblea General de socios fundadores y benefactores como máxima autoridad de la Fundación, nombrándose en su lugar los miembros de la Junta Directiva".

     Por ello, prosigue el documento, "desde el momento en que tuvieron conocimiento de lo sucedido, la embajada de Italia, el consulado general en Caracas, el consulado en Maracaibo, y todas las instituciones representativas de la comunidad italiana en Venezuela, deben ser considerada independiente y desvinculada de la citada Fundación". Cabe recordar que la Fundación Hospital Italiana inició su actividad en Caracas el 31 de enero de 2022 en colaboración con el Instituto Europeo de Oncología de Milán, tras un arduo trabajo y un difícil proceso organizativo, complicado aún más por la pandemia de la Covid-19.

     De fuentes del comité organizador, ANSA ha podido saber que los intentos de revocar las "disposiciones adoptadas que son ilegítimas y nulas, por no contar con el preceptivo dictamen del cónsul general" resultaron en vano. Entre otras cosas, se refiere "al aumento de la cuota para convertirse en miembro fundador (de 500 a 3.000 dólares); la limitación del número de miembros fundadores, con derecho a voz y voto, a 50; la extensión del mandato del Consejo Rector de 2 a 5 años, prorrogables por un segundo mandato, la derogación de varios órganos, incluidos el Comité Promotor y la Asamblea General de Socios, y la atribución al mismo Consejo Rector de la condición de máxima autoridad de la Fundación".

     "También fue derogado el artículo que exigía, como en todas las asociaciones de italianos en el extranjero, el dictamen favorable del Jefe de Misión y del Cónsul General en caso de enajenación de la institución", indicaron las fuentes. (ANSA).   

Leggi l'articolo completo su ANSA.it