Su presencia ante el tribunal habría sido muy hipotética, dado que el director de 91 años huyó de la justicia estadounidense en 1977 tras ser condenado en otro caso en el que se le acusaba de violación de una menor.
El caso de 1973 fue "resuelto durante el verano para satisfacción mutua de las partes" y el juicio fue "anulado formalmente", dijo su abogado, Alexander Rufus-Isaacs, en un correo electrónico.
Según la denuncia presentada el año pasado, Roman Polanski llevó a la entonces adolescente -anónima en el documento- a un restaurante de Los Angeles en 1973. La hizo beber tequila y luego la llevó a su casa antes de agredirla.
La víctima, cuya edad se desconoce, hizo públicas estas acusaciones en 2017, solicitando una indemnización por daños y perjuicios, sin cuantificación precisa. Su denuncia se presentó recién en junio de 2023, poco antes de que finalizara un período según la ley de California en el que los litigantes podían presentar denuncias por violación o agresión sexual que se remontaran a varios años.
Roman Polanski, ganador de tres premios Oscar y una Palma de Oro, ha sido acusado de agresión sexual y violación por una decena de mujeres a lo largo de su carrera, acusaciones que siempre ha negado y que no le han impedido trabajar.
Es considerado fugitivo en Estados Unidos desde hace más de cuarenta años tras ser condenado por "relaciones sexuales ilegales" con una menor de 13 años, Samantha Gailey (ahora Geimer).
En 1977, tras ser detenido, acusado de drogar y violar a esta adolescente, pasó 42 días en prisión antes de ser liberado y luego huir a París, corriendo el riesgo de ser detenido nuevamente.
Es objeto de una orden de arresto internacional del sistema de justicia estadounidense, pero ha escapado a la extradición.
Desde entonces, Samantha Geimer ha pedido en varias ocasiones que se retiren los cargos. (ANSA).
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