De visita en España, Lollobrigida admitió que el gobierno español "es partidario del acuerdo con Mercosur para una relación consolidada en los mercados latinoamericanos, que nosotros pretendemos abrir".
Sin embargo, advirtió el ministro, "debe haber reglas de reciprocidad y protección a todos nuestros sectores estratégicos. O eso lo prevé el acuerdo, o se debe hacer cargo la UE, con un fondo de compensación".
"Se puede imaginar que Italia se beneficiará ciertamente de este tipo de acuerdo en términos de tecnología, vino, queso, pero hay algunos sectores, como el del arroz, en los que corre el riesgo de tener una gran desventaja y debemos entender cómo equilibrarlo", añadió el ministro al margen del XX Foro de Diálogo España-Italia que se celebra en Barcelona.
Lollobrigida habló de "compensaciones y no subvenciones" ante "un daño potencial que hay que remediar, si queremos mantener una competencia leal con mercados donde el costo del trabajo es menor y los derechos no son similares a los nuestros".
Por su parte, el canciller Antonio Tajani se expresó en la misma línea: "estamos a favor del acuerdo con Mercosur, pero es necesario corregir algunos puntos en materia agrícola", dijo en Bruselas, al término de la reunión de la OTAN.
"Estamos trabajando para intentar alcanzar este objetivo porque en lo que respecta a la política industrial vamos en la dirección correcta. Hay algunas cosas para solucionar que afectan a la agricultura, de ahí nuestra decisión de insistir en un cambio", agregó Tajani.
Por el lado del bloque sudamericano, los principales países están de acuerdo con el tratado tal como ha sido definido y que será debatido por los presidentes del grupo en la cumbre de este viernes en Montevideo..
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, aprobó el texto del acuerdo, según el portal UOL, que confirmó que la luz verde definitiva del Mercosur será dada en la cumbre presidencial en la capital uruguaya. "Puedo decir que somos optimistas sobre la conclusión de las negociaciones este año", dijo uno de los negociadores brasileños, el embajador Maurício Carvalho Lyrio.
Por su parte, los gobiernos del presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, y del argentino, Javier Milei, también expresaron su apoyo al texto elaborado en Brasilia, agrega la información.
Solo el presidente paraguayo Santiago Peña todavía presenta cierta resistencia. (ANSA).
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