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El despliegue de misiles de la Alianza Atlántica es una "peligrosa escalada", advierte Moscú

"Armas de la OTAN ya atacan nuestras regiones", dice el Kremlin en alusión a los territorios ucranianos que Rusia ocupa desde la invasión.

La cumbre afirmó que el ingreso de Ucrania en la OTAN es "irreversible".

Redazione Ansa

(ANSA) - ROMA, 12 LUG - El Kremlin renovó hoy sus críticas a las resoluciones tomadas por la cumbre de la OTAN en Washington y advirtió que, en particular, el despliegue de misiles de largo alcance es una "peligrosa escalada" del conflicto.
    El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, destacó que los misiles suministrados por la OTAN a Ucrania "ya se están utilizando para atacar a Rusia", pero los planes para desplegar misiles de mayor alcance, anunciados en Washington, podrían empeorar la situación, dijo Peskov.
    "Lo importante es que estos misiles se utilizan para atacar nuestras regiones", dijo a los periodistas, refiriéndose a las cuatro regiones que Rusia ocupa en territorio ucraniano desde la invasión y que reivindica como propias.
    "En lo que respecta a los misiles de mayor alcance, se trata de una pura acción de bandera falsa y de una nueva escalada muy peligrosa", subrayó.
    El portavoz del Kremlin desmintió que la inteligencia rusa hubiera preparado un plan para asesinar al director general de la empresa armamentista alemana Rheinmetall, que suministra armas a Ucrania.
    "Todo está presentado al estilo de otra historia falsa, por lo que esas noticias no pueden tomarse en serio", dijo Peskov, cuando se le preguntó sobre el informe de la CNN de fuentes occidentales anónimas que sostienen que Rusia había planeado matar a Armin Papperger, el jefe de Rheinmetall.
    Según la emisora, el ataque fue evitado por los servicios secretos de Estados Unidos y Alemania.
    Las palabras de Peskov reflejan la tensión derivada de una cumbre histórica de la OTAN en Washington, con decisiones inéditas: misiles estadounidenses de largo alcance en Alemania por primera vez desde la Guerra Fría, escudo de la OTAN en Kiev y amenazas de sanciones contra Pekín.
    Ahora es un conflicto abierto entre la Alianza, por un lado, y Rusia y China, por el otro, con el riesgo de una escalada entre los dos bloques globales y de una nueva carrera armamentista.
    El Kremlin ya amenazó con una "respuesta militar" a los misiles estadounidenses y otras medidas "para contener a la OTAN", a la que acusa de estar "de facto plenamente implicada en el conflicto de Ucrania".
    Mientras que China, donde aterrizará la primera ministra Giorgia Meloni a finales de julio, acusó a la Alianza de "incitar al conflicto".
    Washington y Berlín han anunciado que a partir de 2026 comenzarán a desplegar capacidades de largo alcance en Alemania, primero de forma "periódica" y luego "duradera", para "demostrar el compromiso de Estados Unidos con la OTAN y su contribución a la disuasión integrada europea".
    El nuevo arsenal incluirá el SM-6 y el Tomahawk, pero también armas hipersónicas, con un alcance "significativamente mayor que el de los misiles terrestres actuales en Europa".
    Dichos misiles habrían sido prohibidos en virtud del Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio firmado por Ronald Reagan y Mijaíl Gorbachov ; en 1988, pero el pacto se vino abajo hace cinco años en medio de acusaciones mutuas de violaciones entre Moscú y Washington.
    El ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, explicó en la cumbre de la OTAN que la idea es animar a Alemania y a otros países europeos a invertir en el desarrollo y la compra de misiles de largo alcance para llenar "un vacío cada vez más grave en Europa". El despliegue de armas estadounidenses daría tiempo a los aliados de la OTAN para prepararse.
    En esta dirección va la carta de intención firmada en la cumbre por Alemania, Francia, Italia y Polonia para desarrollar misiles de largo alcance en el Viejo Continente. (ANSA).
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