Los cuatro soldados, según fuentes gubernamentales, no corren peligro de muerte.
Equipos de Unifil se desplazaban a la base italiana de Shama, en Líbano, para verificar la dinámica del suceso que provocó heridas leves a cuatro soldados que se encontraban en el interior de uno de los búnkeres.
Según las primeras informaciones, los dos cohetes fueron disparados por Hezbolá. Los soldados se encontraban en los búnkeres porque se había activado el nivel de alerta 3 -señalado en momentos de peligro de ataques entre Israel y Hezbolá en ese momento-, que también les obliga a llevar cascos y chalecos.
El ataque provocó la indignada reacción de la premier italiana, Giorgia Meloni.
"Me enteré con profunda indignación y preocupación de la noticia de los nuevos ataques sufridos por el cuartel general italiano de Unifil en el sur del Líbano, que también provocaron heridas a algunos de nuestros soldados comprometidos en una misión de mantenimiento de la paz, afirmó la premier.
"Deseo expresar mi solidaridad y mi cercanía y la del Gobierno a los heridos, a sus familiares y mi sincero agradecimiento por la actividad llevada a cabo diariamente por todo el contingente italiano en el Líbano", añadió Meloni en un comunicado oficial.
La premier subrayhó que "tales ataques son inaceptables y renuevo mi llamamiento a las partes sobre el terreno para que garanticen, en todo momento, la seguridad de los soldados de la Unifil y colaboren para identificar rápidamente a los responsables".
Por su parte, el canciller italiano, Antonio Tajani, dijo que "los que impactaron en la base de Unifil "fueron dos misiles, por lo que se ve lanzados por Hezbolá".
"Una vez más, lo que está ocurriendo es inaceptable y, al igual que le hemos pedido a Israel que preste la máxima atención, le decimos con la misma firmeza a Hezbolá que los militares italianos no pueden ser tocados. Si piensan que pueden seguir causando daños a las bases italianas, se han equivocado", agregó.
También el ministro de Defensa italiano, Guido Crosetto, consideró "intolerable que una vez más una base Unifil haya sido atacada. Intentaré hablar con el nuevo ministro de Defensa israelí, algo que ha sido imposible desde que asumió el cargo hasta hoy, para pedirle que impida el uso de las bases Unifil como escudo".
"Aun más intolerable es la presencia de terroristas en el sur del Líbano que ponen en peligro la seguridad de los cascos azules y de la población civil", agregó Crosetto, en alusión a los milicianos de Hezbolá.
El ministro reveló que "me puse inmediatamente en contacto con el comandante del contingente, Stefano Messina, para conocer las condiciones de los cuatro soldados, que no son motivo de preocupación".
"También me puse en contacto con mi homólogo libanés para reiterarle que el contingente Unifil italiano permanece en el sur del Líbano para ofrecer una oportunidad de paz y no puede convertirse en rehén de los ataques de las milicias" de Hezbolá, añadió Crosetto. (ANSA).
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