También hay expectación por la nueva interfaz cerebro-ordenador que China se dispone a probar y que podría competir con los chips de la empresa Neuralink de Elon Musk, y por la entrada en funcionamiento, en Suecia, del nuevo acelerador europeo que convertirse en la fuente de neutrones más poderosa del mundo.
Grandes expectativas también para el Tratado Global de Preparación para Pandemias, que no pudo concluirse en 2024, de cara a la conferencia climática COP30 prevista para noviembre próximo en Belém, Brasil, donde se espera que se concreten las decisiones que han quedado sin resolver, y para las negociaciones de un tratado sobre plásticos que establezca un marco internacional de normas vinculantes. (ANSA).
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