La enorme fila de coches y furgonetas, que es al menos un 300% mayor que en años anteriores, según las autoridades, se debe a la creciente inseguridad en las rutas del norte al centro del país, que en muchos casos están dominadas por bandas criminales.
Líderes migrantes han advertido del calvario que representa para muchos regresar a México para las vacaciones de Navidad con sus familias, tanto por las extorsiones de funcionarios aduanales y policías, como por el "acoso del crimen organizado".
Los migrantes, cargados con regalos para sus familiares, fueron escoltados por la Guardia Nacional en varios tramos de carreteras de los estados de Tamaulipas y Nuevo León. (ANSA).
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