El resultado de su acción, según los investigadores estadounidenses, fue el ataque con drones contra una base militar estadounidense en Jordania, que costó la vida a tres soldados norteamericanos el pasado mes de enero.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Teherán convocó entonces al embajador de Suiza en Irán, que representa los intereses estadounidenses en el país, y al encargado de negocios italiano, informaron medios locales.
"Consideramos que tanto las sanciones crueles y unilaterales de Estados Unidos contra Irán como estas detenciones son contrarias a todas las leyes y normas internacionales", fue la protesta iraní, que niega cualquier implicación en el ataque en Jordania y rechaza las acusaciones contra sus dos ciudadanos, calificándolas de "infundadas".
El 16 de diciembre, los fiscales del tribunal federal de Boston presentaron cargos contra Mahdi Mohammad Sadeghi y Mohammad Abedini-Najafabadi por "conspirar para exportar componentes electrónicos sofisticados de Estados Unidos a Irán en violación de las leyes de sanciones y control de exportaciones del Departamento de Justicia de Estados Unidos".
El mismo día, uno de los dos, Abedini-Najafabadi, de 38 años, fue detenido por los investigadores de la DIGOS -la División General de Investigaciones y Operaciones Especiales de Italia- en el aeropuerto de Malpensa, donde se encontraba en tránsito desde Estambul, y ahora se halal en prisión en Busto Arsizio a la espera del fallo del Tribunal de Apelación, que es el que decide sobre su extradición a Estados Unidos.
Según los fiscales estadounidenses, es el fundador y director ejecutivo de una empresa iraní que produce módulos de navegación utilizados en el programa de drones militares Pasdaran.
Para el segundo, Mahdi Mohammad Sadeghi, de 42 años, ciudadano estadounidense-iraní, arrestado en Estados Unidos, se celebrará una audiencia de detención el 27 de diciembre. (ANSA).
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