Política

Se prepara la invasión a Gaza, redadas por los rehenes

Ejército ordena salir del Norte. Netanyahu, "es solo el inicio"

Redazione Ansa

(ANSA) - TEL AVIV, por Massimo Lomonaco - A un paso de la operación terrestre en Gaza, Israel ya ha puesto sus botas en la Franja con acciones de comando, apoyadas desde el cielo con ataques aéreos a gran escala, en un intento de localizar a los más de 150 rehenes llevados al enclave palestino.
    Se trata de una acción necesaria, señalan expertos militares, con el objetivo de prevenir posibles asesinatos de secuestrados cuando comience la invasión de la Franja, ahora definida como "inminente" por varias fuentes.
    "Ese sábado maldito -afirmó por la tarde el primer ministro Benjamín Netanyahu, dirigiéndose a la nación por primera vez durante el Shabat- quedará grabado en la historia de Israel. No lo olvidaremos. Estamos golpeando a nuestros enemigos con una fuerza sin precedentes. Recién han comenzado a pagar el precio, no saben qué pasará, es sólo el comienzo. Destruiremos y erradicaremos a Hamás".
    "El destino de los rehenes -aseguró el ejército- es una prioridad absoluta. Necesitamos información fiable, basada en nuestras fuentes". No se sabe en qué medida sirvió la incursión del comando para recabar pruebas sobre su paradero. La realidad sobre el terreno es que el ultimátum dado por el ejército a la población del norte de Gaza para que se desplazara hacia el sur aceleró todo.
    El mensaje de los militares fue claro, con la petición de "evacuar a todos los civiles de la ciudad de Gaza de sus hogares por su seguridad y trasladarlos a la zona al sur de Wadi Gaza", una vía fluvial cercana a la ciudad. "Sólo se le permitirá regresar a la ciudad de Gaza cuando se haga otro anuncio que lo permita", se indicó.
    La estrategia parece clara: impedir que Hamás se escude de la población civil y entrar en el enclave palestino desde el norte como primer paso. Hamás, que en los últimos días rechazó cualquier negociación sobre corredores humanitarios, reaccionó al anuncio del ejército calificándolo de "propaganda".

 

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Las fuerzas israelíes listas para una ofensiva masiva sobre Hamás en Gaza


    Luego tomó medidas y comenzó a erigir puestos de control y barreras para impedir que los residentes abandonaran la ciudad de Gaza. El caos estalló en la parte norte de la Franja y miles de personas huyeron. La propia UNRWA, la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, anunció que había trasladado muchas de sus estructuras al sur y pidió que el ejército no atacara las escuelas donde se guarecen los refugiados.
    El ejército respondió que "hará todo lo posible para no atacar lugares sensibles. Pero -advirtió- en el pasado Hamás ha utilizado hospitales, escuelas y mezquitas como escudos para defender sus infraestructuras".
    El ministerio del Interior de Gaza anunció que "cuatro bombas cayeron sobre los desplazados y hay al menos 70 muertos y 200 heridos". Anteriormente, el propio Hamás había anunciado que 13 rehenes, incluidos algunos extranjeros (algunos con doble ciudadanía), murieron en ataques israelíes.
    Poco antes de que Netanyahu hablara, la fuerza aérea del Estado judío anunció que había lanzado "ataques a gran escala contra objetivos de Hamás en el enclave palestino". El objetivo sigue siendo desmantelar la rueda de mando de Hamás y otras facciones, atacar las plataformas de lanzamiento de cohetes hacia Israel y matar a los líderes de las organizaciones terroristas.
    Los disparos contra Israel, tras una noche bastante tranquila, se reanudaron con fuerza a primera hora de la tarde, con decenas de cohetes dirigidos a Ashkelon y a la zona sur y central del país, incluidos Tel Aviv y el aeropuerto internacional Ben Gurion. El número de muertos en ambos bandos sigue aumentando inexorablemente.
    En Israel hay más de 1.300 muertos (257 soldados) y 3.300 heridos. En Gaza, según el Ministerio de Salud local, ha habido al menos 1.800 víctimas y 6.388 heridos. También en Cisjordania se produjeron 11 muertos en enfrentamientos con el ejército israelí durante el Día de la Ira proclamado por Hamás con motivo del primer viernes de la operación "Inundación de Al Aqsa". Un total de 46 palestinos han muerto en los Territorios desde el inicio de las hostilidades.
    El frente norte con el Líbano -donde se teme lo peor- fue una sucesión de cohetes de Hezbolá y respuestas de la artillería israelí. Un camarógrafo libanés de Reuters murió en un ataque israelí y otros cinco reporteros resultaron heridos.
    En tanto, a Israel llegaron enviados de Europa y Estados Unidos, entre ellos el ministro de Asuntos Exteriores de Italia, Antonio Tajani. Todos expresaron solidaridad con Israel y condenaron a Hamás. "Peor que ISIS", afirmó el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin. "El ataque más atroz contra los judíos desde el Holocausto", insistió la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. (ANSA).
   

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