Lo escribió Politico, citando a cuatro personas familiarizadas con el asunto.
El objetivo sería buscar un punto de equilibrio, ayudando al aliado estadounidense, pero evitando la ira de Teherán y la de sus conciudadanos hacia Israel.
Estados Unidos ha desplegado durante mucho tiempo miles de tropas en instalaciones en los Emiratos Arabes Unidos, Kuwait, Omán, Qatar y otras partes del Medio Oriente, y el papel de los países árabes en el apoyo a las actividades militares estadounidenses ha sido objeto de intenso escrutinio desde que estalló la guerra entre Israel y Hamás en octubre.
El conflicto ha enfrentado los intereses de los gobiernos árabes de calmar la ira de sus ciudadanos hacia Israel con su deseo de ayudar a Washington a repeler los ataques respaldados por Irán.
Las restricciones a las actividades estadounidenses en su territorio reflejan los cálculos árabes sobre cuán solidarios pueden ser, sin enfadar a Irán. (ANSA).
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