"El presidente dedicó su vida al servicio del pueblo", dice Mojtaba, un ingeniero de telecomunicaciones de 43 años de Teherán, donde la noticia del accidente del helicóptero en el que viajaba fue recibida anoche con oraciones colectivas públicas por parte de los seguidores del gobierno, que también se congregaron en Mashhad, su ciudad natal.
Esas mismas personas hoy lloran su muerte, y sostienen que Raisi amaba el martirio y que finalmente su deseo se ha cumplido.
"Luchó contra los enemigos internos, como los elementos occidentales que salen a las calles sin velo, y luchó duramente contra los enemigos extranjeros, incluido Israel. Admiré el ataque con misiles contra el régimen en abril, bajo la administración de Raisi, que mostró al mundo la fuerza de Irán", añade Mojtaba.
En las redes sociales, muchos iraníes cuestionan a Raisi "por su fuerte oposición a activistas, periodistas y mujeres después de tomar el poder, especialmente por su papel en el asesinato y ejecución de jóvenes durante la sangrienta represión de las revueltas" de 2022.
Esas protestas estallaron después de la muerte de Mahsa Amini, la veinteañera kurda que perdió la vida tras ser detenida por la policía moral por no llevar el velo de manera adecuada.
Al conocerse el anuncio de la muerte de Raisi, muchos usuarios han compartido videos en los que se ven personas felicitándose mutuamente mientras reparten dulces, bailan en las calles o encienden fuegos artificiales para celebrar.
"¡Puedo decir que ahora creo completamente en el karma! No tuvimos el poder para intentar detener a Raisi, pero Dios lo ha castigado de esta manera, debido a su participación en el asesinato y ejecución de manifestantes, así como por su papel en las ejecuciones masivas de activistas políticos en los años 80, cuando era vicefiscal de Teherán", afirma Taraneh, de 31 años.
La joven añade que "las políticas económicas del presidente solo han llevado a una devaluación de la moneda local y una alta inflación en los últimos años". Muchas personas comparten la misma opinión que Taraneh, quien trabaja como maestra de apoyo en la capital.
Algunos han escrito en redes sociales que el accidente está dedicado "a la memoria de aquellos que fueron asesinados o encarcelados debido al papel de Raisi en la brutal represión de las protestas en los años 80, en 1999, en 2009, en 2017, en 2019 y en 2022, así como a las 179 víctimas del derribo del avión ucraniano cerca de Teherán por parte de Irán en 2020".
La asociación de familias de las víctimas del avión derribado publicó una declaración en la que se afirma que "como jefe de la judicatura, Raisi trató con todas sus fuerzas de bloquear los intentos de llegar a la verdad y a una investigación justa".
Mientras que el hermano de un joven manifestante, Navid Afkari, ejecutado en 2020, ha contado en un mensaje en X que nunca había visto a su madre tan feliz: "Esperamos que Raisi haya sufrido el mismo dolor que nosotros, aunque solo sea por unos segundos".
La madre de Pejman Fatehi, otro prisionero político ahorcado en febrero, también ha publicado un video en el que se la ve celebrar y bailar mientras escucha música kurda. "La de Raisi fue una muerte fácil, porque debería haber sido juzgado y castigado por sus crímenes", comenta la abogada iraní y premio Nobel de la Paz Shirin Ebadi: "Hoy entendemos lo que hizo Raisi al ver a personas tan felices celebrando su muerte". (ANSA).
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