(ANSA) - RIO DE JANEIRO, 25 LUG - "Sobre la propuesta
brasileña de un impuesto a los superricos, todos somos
conscientes de que es responsabilidad de cada país, difícil de
superar con esquemas globales, pero creo que las dificultades no
ponen en peligro el compromiso común", dijo hoy a ANSA el
comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni.
"En el documento de conclusiones de este G20 habrá una
voluntad común de considerar primeros pasos en esta dirección",
agregó Gentiloni.
"Los primeros pasos, explica Gentiloni, podrían consistir en
la puesta en marcha de mecanismos de intercambio de información
entre los distintos países, en particular en el capítulo
inmobiliario".
"No debemos ocultar las dificultades y dificultades de cada
país en cuestiones como estas, que son competencias típicamente
nacionales, y el hecho de que si se quiere un mecanismo para
gravar a estas personas, o el mecanismo es global, o el país que
introduce medidas de este tipo solo vería que estas inmensas
riquezas se trasladaran a otra parte".
"Pero creo, añade, que a la presidencia brasileña se le
debe dar crédito no solo por insistir en las dos cuestiones
abiertas: el acuerdo global sobre fiscalidad al que se ha
comprometido la Unión Europea y que debemos concluir, sino
también por haber puesto sobre la mesa este nuevo desafío que
creo que el enorme aumento de algunas riquezas individuales se
ha vuelto estratosférico justifica". (ANSA).
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