Es necesario un plan "común" y "coordinado" para toda la zona, así como un "plan B ampliado urgente para el control y la erradicación de la enfermedad", escriben los expertos, que añaden que "la epidemia parece avanzar más rápido que medidas" y "hay temor a que se extienda hacia el sur, a Toscana".
El gobierno italiano minimizó las críticas. "La estrategia de lucha contra la peste porcina está activa en el país", declaró el comisario extraordinario designado para la peste porcina africana, Giovanni Filippini.
"La nueva estructura de comisarios dio inmediatamente continuidad a las acciones sanitarias para el control y la gestión de la emergencia. Y se desarrollará, también por las recomendaciones de la misión de los expertos de la Comisión, un ajuste de la estrategia ya compartida con los Ministerios competentes y lista para ser transmitida a Bruselas".
En el informe de su misión, los tres responsables de la UE -el alemán Klaus Depner, el lituano Marius Masiulis y el checo Petr Satran- hacen balance de la evolución de la epidemia en Italia, alimentada en el Norte por la transmisión a través de jabalíes y cerdos domésticos.
Destacó varias cuestiones críticas: desde la débil coordinación entre regiones hasta los "recursos limitados" para la vigilancia, pasando por "el apoyo financiero insuficiente y los problemas técnicos" que acompañan a la construcción de barreras.
En cuanto a las estrategias aplicadas para controlar la enfermedad, "cada región-provincia aplica sus propias medidas con una mínima coordinación con sus vecinos", denuncia el Equipo Veterinario de Emergencia de la UE, que insta a aplicar un plan "coordinado y armonizado" en la zona norte, que tenga en cuenta "la situación epidemiológica general, independientemente de las fronteras administrativas".
Se observa que reducir la población de jabalíes "a cero" mediante la caza "parece un objetivo difícil de alcanzar": sería necesario, por tanto, un plan estratégico de caza "bien pensado y planificado", que debería desarrollarse y coordinarse a nivel central por un grupo de expertos para toda la zona endémica".
"La caza es solo una herramienta y no la solución" al problema, advierten. Y también se necesita una mayor coordinación para la vigilancia, que debería ser "prioritaria" y, en cambio, sufre los efectos de los "recursos limitados".
Las medidas de vallado "pueden ser una herramienta eficaz para limitar el movimiento de los jabalíes", pero su construcción se ve retrasada por "un apoyo financiero insuficiente y problemas técnicos" y si se hace tarde, las vallas "pueden no tener el efecto deseado" para detener la propagación de peste porcina en áreas no infectadas". (ANSA).
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