(ANSA) - LONDRES, 13 JUL - El sueño de conquistar su primer título de Grand Slam y convertirse en la tercera tenista italiana de la historia en lograrlo se esfumó hoy para Jasmine Paolini, derrotada en la final de Wimbledon por la checa Barbora Krejcikova.
La nueva reina del All England se impuso por 6-2, 2-6 y 6-4 y sucede en el trono a su compatriota Marketa Vondrousova, quien el año pasado derrotó en la final a la tunecina Ons Jabeur, superada un año antes en la definición por la kazaja de origen ruso Elena Rybakina, "víctima" de Krejcikova este año en semifinales.
Paolini, que escaló al quinto puesto del ranking WTA, no perdió su sonrisa característica a pesar de ver frustrado su sueño de convertirse en la primera tenista de su país en conquistar Wimbledon y, de peso, sacarse la espina por la final que previamente perdió en Roland Garros ante la polaca Iga Swiatek, número uno del mundo.
"Hoy estoy un poco triste, pero trato de seguir sonriendo porque recordaré este día como una bella jornada", destacó Paolini tras el partido en el que buscaba emular a sus compatriotas Francesca Schiavone y Flavia Pennetta, campeonas en Roland Garros en 2010 y del US Open en 2015, únicas tenistas "azzurras" hasta el momento en conquistar un Grand Slam.
"Jugué la final de Wimbledon, un torneo que veía por televisión cuando era niña y hacía fuerza por (el suizo Roger) Federer y el hecho de estar hoy aquí es una locura", agregó Paolini, ovacionada por el público en la Cancha Central del All England.
"De París a Wimbledon fueron meses muy vertiginosos y estas dos semanas resultaron increíbles. Fue muy hermoso sentir el amor que me brindó el público", agregó la italiana al reiterar que "haber jugado en este estadio fue un sueño hecho realidad".
"Felicito a Barbara, por el gran partido que jugó, y también a todo su equipo", completó Paolini, al agradecer también "a mi familia, a mi equipo y a todos los que me apoyaron y creyeron en mí, porque sin ellos, hoy no estaría aquí", afirmó.
"Disfruté de cada momento", completó al agradecer también "a todos aquellos que hacen posible este torneo, desde los jueces a los alcanzapelotas. Seguramente me olvidó de alguno y me disculpo", finalizó la tenista de 28 años que se ganó el corazón de todos con su pasión en la cancha y su simpatía.
Paolini se lleva de Londres el aplauso y el reconocimiento también de su rival en la final, quien destacó que fue "un partido en el que peleamos cada pelota con Jasmine, a quien felicito junto con su equipo porque es increíble lo que logró en tan poco tiempo, jugando dos finales consecutivas de Grand Slam".
La nueva monarca de Wimbledon afirmó que "este es el día más bello de mi vida, seguramente de mi vida como tenista" y confesó: "Es imposible explicar lo que siento y no puedo expresar la alegría que siento al haber ganado un partido tan lindo en una final de Wimbledon, algo increíble e inolvidable", completó Krejcikova.
Eugenio Giani, gobernador de la región de Toscana, de la que es oriunda Paolini (de la ciudad de Bagni di Lucca), felicitó a la tenista italiana con un mensaje que decía: "Gracias por todo Jas, aún cuando el resultado no te premió, has luchado hasta el último punto de un partido fantástico que nos mantuvo en vilo a todos".
"Tu ciudad y toda Toscana se siente orgullosa de ti, que en el lapso de apenas un mes jugaste las finales de Roland Garros y de Wimbledon y demostraste ser una de las mejores tenistas del circuito. Tu tenacidad y tu sonrisa son un ejemplo para que todos los jóvenes se acerquen al deporte. Felicitaciones", agregó.
Paolini, hija de padre italiano y madre polaca de origen ghanés, disfruta del mejor momento de su carrera, habiendo sido la primera tenista de su país en acceder a dos finales consecutivas de dos Grand Slam distintos.
En Wimbledon fue la representante italiana que más lejos llegó, pues su compatriota Lorenzo Musetti (25) se despidió el viernes al caer en semifinales frente al serbio Novak Djokovic, siete veces campeón del torneo cuya final reeditará ante el español Carlos Alcaraz, defensor de la corona, este domingo.
El italiano Jannik Sinner, flamante número uno del mundo, fue eliminado en cuartos de final por el ruso Daniil Medvedev (superado el jueves por Alcaraz) al cabo de cinco sets y tras padecer algunos problemas físicos que condicionaron su actuación.
Paolini igualó lo hecho por Schiavone, quien también disputó dos finales sucesivas en un Grand Slam, pero ambas en Roland Garros, donde se consagró en 2010 derrotando a la australiana Samantha Stosur y cayó al año siguiente frente a la china Na Li.
En 2012 fue Sara Errani la que cayó en la final del Abierto de Francia ante la rusa Maria Sharapova y fue la última italiana en acceder a esa instancia hasta que Paolini lo hizo este año.
Hoy, la joven de la eterna sonrisa no pudo emular a las mencionadas Schiavone y Pennetta (que en la final del US Open superó a su compatriota Roberta Vinci), ni a Sinner, que este año conquistó el Abierto de Australia e inscribió su nombre en la lista que inició Nicola Pietrangeli, campeón en Roland Garros en 1959 y 1960, mientras que Adriano Panatta lo hizo en ese mismo torneo en 1976. (ANSA).
Wimbledon: Krejcikova es la nueva reina
La checa derrotó a la italiana Paolini, que había caído también en la final de Roland Garros