Así lo afirmaron las autoridades locales prorrusas, según las cuales el vehículo fue alcanzado por una ojiva de racimo.
El embajador Rodion Miroshnik, responsable del expediente sobre violaciones contra civiles por parte de las fuerzas ucranianas, acusó a las tropas de Kiev de golpear intencionalmente el autobús.
"Bombardear el centro de una ciudad populosa con una munición de racimo - afirmó el diplomático, citado por Tass - no puede ser accidental. Se trata de una acción deliberada, con la intención de sembrar el miedo y matar al mayor número posible de civiles". (ANSA).
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