"No es Israel y no soy yo", subrayó Netanyahu.
El premier, respondiendo a las acusaciones de que prolongaba la guerra para su supervivencia política, agregó: "No me preocupa mi futuro político, sino el futuro de Israel. La guerra habría terminado ayer si Hamás hubiera devuelto a los rehenes.
Pero Hamás se niega a hacerlo". (ANSA).
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