(ANSA) - MADRID, 19 NOV - El último acto de Rafael Nadal en el tenis no fue como él y tantos otros soñaban y España cayó por 2-1 frente a Países Bajos en Málaga por los cuartos de final de la Copa Davis y se despidió del torneo.
Un adiós que la leyenda de 38 años no merecía, pero resultó inapelable tras su derrota en el partido que abrió la serie y la posterior del doble "ibérico" al que no le bastó la presencia de Carlos Alcaraz, que ganó el único duelo de la jornada para el equipo ibérico.
No pudo ser la despedida gloriosa que el actual número tres del ranking esperaba tributarle a su ídolo, pues Alcaraz y Marcel Granollers dieron batalla durante dos horas y 11 minutos, pero sucumbieron por 7-6 (7/4) y 7-6 (7/3) ante Wesley Koolhof y Botic Van De Zandschulp.
Van de Zandschulp (80) podrá contarle algún día a sus descendientes que le ganó el último partido de su prolífica carrera a Nadal, vencedor de 22 títulos de Grand Slam, 14 de los cuales los celebró en Roland Garros.
"Intenté ganar, como lo hice siempre, pero no pude. Si yo fuese el capitán, no contaría conmigo en el próximo partido", resumía con tristeza Nadal, tras caer por 6-4 y 6-4 en una hora y 53 minutos de juego ante Van de Zandschulp en el duelo que abrió la serie.
"No lo digo porque no tenga ganas de jugar, sino por mi nivel de juego. Este quizás haya sido mi último partido y se lo debo al capitán (David Ferrer, Ndr)", resumió el legendario tenista tras su derrota y antes de decretarse la eliminación de España.
"Si él decidió que yo debía jugar, sabíamos que era un riesgo, pero es el capitán y yo no lo presioné en ese sentido.
Lamentablemente, no pude siquiera ganar un set, a pesar de que me había preparado muy bien para esta serie, si no, yo mismo me hubiese descartado", confesó.
Una velada que anticipaba otro desenlace en el adiós de Nadal, quien no pudo contener las lágrimas de emoción cuando el público, sus compañeros y sus rivales de turno lo ovacionaron de pie en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena.
Alcaraz intentó extender el epílogo de esa existosa carrera al derrotar a Tallon Griekspoor y dejar igualada la serie en una hora y 25 minutos de juego, con parciales de 7-6 (7/0) y 6-3, pero la derrota en el dobles con Granollers sentenció el destino.
"No quiero pensar demasiado en que el rival es Nadal porque me volvería loco", confesaba el Van de Zandschulp antes de su victoria ante un rival que lo había superado en los dos duelos previos que jugaron en Roland Garros y en Wimbledon en 2022.
No pudo ser ni para España, ni para Nadal, que con la "armada ibérica" celebró cinco de las seis "Ensaladeras de Plata" logradas hasta el momento, la primera de ellas en 2000, sin él en el equipo y las restantes, con Nadal, en 2004, 2008 (no estuvo frente a Argentina en la final, pero sí en el torneo), 2009, 2011 y en 2019.
El pasaje a semifinales fue para Países Bajos, que le amargó la fiesta de despedida y espera en la próxima ronda del torneo por el vencedor de la serie que pondrán en marcha mañana Alemania y Canadá en este mismo escenario.
Por la otra llave lo harán el jueves Estados Unidos (32) y Australia (28), los equipos más laureados de la historia, mientras que ese mismo día Italia, con Jannik Sinner, número uno del mundo, chocará con Argentina buscando dar un paso más en la defensa del título.
Para Nadal llegó la hora del adiós tras haber participado previamente en el flamante torneo "Six King Slam", que también animaron en Arabia Saudita el serbio Novak Djokovic, su vencedor en el duelo por el tercer puesto y su compatriota Alcaraz, derrotado en la final por Sinner.
El adiós de Nadal deja a Djokovic "huérfano" de sus colegas del "Big Three", que acapararon títulos y protagonismo en las últimas dos décadas y que completaba el suizo Roger Federer, quien hoy dijo presente a la distancia en la despedida del español.
"Amigo mío, eres el orgullo del tenis. Que carrera increíble has tenido", afirmó Federer en un sentido mensaje en el que reconoce: "Me has hecho trabajar mucho más duro de lo que jamás hubiera imaginado y me obligaste a reinventar mi juego, pero me hiciste querer aún más este deporte".
"Me ganaste muchos partidos, más de los que yo logré ganarte y me llevaste hasta un punto en el que nunca nadie pudo llevarme", agrega la nota en le que recuerda aquel "Abierto de Australia de 2004 en el que por primera vez llegué al tope del ranking, pero dos meses después te enfrenté en Miami, con tu musculosa roja y me ganaste de modo convincente".
"Estábamos en el inicio de nuestro viaje y lo vivimos juntos.
Veinte años después, Rafa, quisiera decirte que has hecho algo increíble, incluidos tus 14 títulos en Roland Garros. Hiciste que España se sienta orgullosa y también el tenis".
El astro suizo recordó también "la Laver Cup de 2022, mi último torneo. Para mí, significó mucho tenerte a mi lado, no como rival, sino como pareja de dobles y compartir cancha contigo aquella tarde y compartir mis lágrimas contigo también es uno de los momentos que recordaré por siempre".
"Hoy, tú estás en el último capítulo de tu épica carrera.
Hablaremos cuando termines, pero ahora sólo quiero felicitarte a tí, a tu equipo y a tu familia, que fueron claves en tus éxitos y quiero que sepas que tu viejo amigo hará fuerza por tí ahora y en el futuro", completa el mensaje. (ANSA).
Copa Davis: Triste adiós para Nadal
España cayó frente a Países Bajos en la despedida de la leyenda del tenis