"No quedará rastro de los cismáticos porque están cumpliendo las órdenes del diablo, erosionando la ortodoxia en las tierras de Kiev", sostuvo Kirill al final de la liturgia en la Catedral de la Dormición del Kremlin de Moscú.
"El gobierno actual no reinará ni gobernará en Ucrania", predijo el patriarca.
El gobierno ucraniano se ha movido recientemente contra la Iglesia ortodoxa ucraniana -denuncia la agencia de noticias rusa-, ordenando registros frecuentes de sus iglesias y acusando a los sacerdotes de actividades subversivas y traición.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, sancionó a algunos representantes de la iglesia y ordenó la creación de un proyecto de ley para prohibir las organizaciones religiosas afiliadas a los "centros de influencia" rusos. (ANSA).
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