El organismo, que no forma parte de las instituciones de la Unión Europea, aunque tenga su sede en Estrasburgo, tras la reciente expulsión de Rusia, incluye 46 países.
La reunión que comienza el lunes no es sólo la primera del año, sino también y sobre todo la primera a la que asiste la delegación italiana renovada sobre la base de los resultados de las elecciones del pasado septiembre y que presenta varias novedades.
Entre titulares y suplentes, repartidos en partes iguales entre diputados y senadores, hay un total de 36 parlamentarios italianos destinados a participar en las actas de Estrasburgo.
Gracias al éxito registrado en septiembre, los representantes de Hermanos de Italia (FDL) -partido de la premier italiana, Giorgia Meloni, y que integra la coalición de gobierno- pasaron de 2 a 10, mientras que los de la Liga bajaron de 8 a 6 y los de Fuerza Italia (FI), de 5 a 4.
En general, por tanto, un balance positivo de 5 diputados a favor de la coalición de gobierno italiana que, sin embargo, beneficiará totalmente al grupo conservador donde, a diferencia del Parlamento Europeo, conviven Hermanos de Italia y la Liga.
El Partido Demócrata logró mantener su cuota sin cambios (6) mientras que la representación del Movimiento Cinco Estrellas (M5S) se redujo a la mitad (de 8 a 4). Y aún no se sabe si confirmará su pertenencia al grupo socialista (con el Partido Demócrata) u optará por la izquierda radical.
Italia Viva, en tanto, logró tener dos representantes que se sumaron al grupo de liberales de la Alianza por los Liberales y Demócratas por Europa (ALDE).
Sin embargo, el nuevo color político no es la única novedad de la delegación que debutará el lunes. La presencia femenina se ha fortalecido de 13 a 17 integrantes e incluye nombres tan conocidos como los de Deborah Bergamini y Licia Ronzulli para FI, Elisabetta Gardini (FDL), Elena Bonetti (IV) y Susanna Camusso (PD).
Entre los hombres, está confirmación de Piero Fassino, el regreso de Andrea Orlando y la llegada de Andrea Crisanti.
La nueva delegación italiana en el Consejo de Europa tendrá que tratar con el resto de la asamblea sobre temas de protección de la democracia y respeto de los derechos humanos. Pero todavía tiene que elegir a su presidente y asignaciones a varias comisiones.
Sobre todo, la guerra de Ucrania y sus implicaciones estarán en el centro de los trabajos de la asamblea, tema sobre el que hablará la ministra de Exteriores alemana, Annalena Baerbock.
Pero la verdadera primera prueba para medir el equilibrio político será la elección del nuevo presidente de la asamblea parlamentaria, cargo para el que son candidatos el holandés Tiny Kox (izquierda) y el ucraniano Oleksandr Merezhko (conservador).
(ANSA).
Leggi l'articolo completo su ANSA.it