Unión Europea

OTAN resurge, la UE acelera defensa

La Alianza crece y blinda el Este, Bruselas busca más autonomía

Redazione Ansa

(ANSA) - BRUSELAS, 20 FEB - La invasión rusa de Ucrania a gra escala, que inició el 24 de febrero de 2022, no solo resucitó a la OTAN, a la que poco tiempo antes el presidente francés, Emmanuel Macrón, había declarado "con muerte cerebral", sino que exhortó a la Unión Europea a repensar sus estrategias militares y de seguridad.
    "Putin logró hacer sexy a la OTAN", dice una fuente diplomática aliada de alto rango durante la extensa fila en el buffet, que lo pone de buen humor para confiar.
    Tiene razón: el 24 de febrero de 2022 lo camió todo.
    La nueva realidad de seguridad, dijo el funcionario, llama a los 27 países miembros de la UE (incluidos los neutrales) a revisar las estrategias militares, los planes de gasto, las capacidades efectivas de las fuerzas armadas. Y, sobre todo, les obligará a colaborar entre sí acelerando el proceso de creación de la inacabada "defensa europea".
    Pero partamos de la OTAN. El presidente ruso, Vladimir Putin, veía con desagrado el eventual ingreso de Ucrania, tal y como prometió en la cumbre de Bucarest en 2008, tanto que pidió expresamente a Bruselas y Washington "garantías" sobre la no adhesión de Kiev.
    Al lanzar la invasión, logró un cambio sísmico en la opinión pública de Finlandia y Suecia, tradicionalmente países no alineados, lo que allanó el camino para que Helsinki y Estocolmo se unieran a la Alianza, llevándola a 32 miembros.
    No es exactamente una victoria para Moscú. Además, Ucrania está siguiendo un curso acelerado -a un costo dramático en términos de vidas humanas y la integridad de la infraestructura civil- en el arte de la guerra, según la doctrina de la OTAN, con el resultado de que Kiev, sea miembro o no, saldrá del conflicto con fuerzas armadas efectivamente alineadas (y equipadas) con los estándares occidentales.
    La Alianza, revitalizada en sus resoluciones y presupuestos, se ha fijado nuevos objetivos. Los miembros del flanco oriental, aterrorizados ante la perspectiva de encontrar divisiones rusas a sus puertas, solicitaron y recibieron una mayor presencia en sus territorios.
    Así, los cuatro batallones multinacionales desplegados en 2017 en Estonia, Letonia, Lituania y Polonia se convirtieron en ocho, con la incorporación de nuevas tropas en Bulgaria, Hungría, Rumanía y Eslovaquia (los efectivos se elevaron a nivel de brigada y en toda la OTAN se movilizaron 40.000 hombres al este).
    Pero eso no es suficiente. El Concepto Estratégico respaldado por los líderes en la cumbre de Madrid de 2022 cobró mayor impulso con el "nuevo modelo de fuerza": una combinación de activos posicionados previamente desde el Báltico hasta el Mar Negro combinados con tropas pre-alerta y capacitadas en listas capaces de movilizar hasta 300 mil soldados en 15 días. Y ahora las capitales trabajan para hacer realidad los anuncios.
    ¿Y la Unión Europea? Algo se mueve. La autonomía estratégica -muy querida por los franceses, que querrían un viejo mundo más independiente del nuevo- parece tener piernas cortas de momento, dado que la guerra de Putin reunió más que nunca el campo transatlántico, con los "porristas" de Washington de Europa del Este, más que nunca.
    La Brújula Estratégica, aprobada en marzo pasado, prevé en todo caso el nacimiento de la primera legión europea (5 mil hombres) con ejercicios conjuntos para 2023.
    La división de tareas parece clara: defensa colectiva para la OTAN, gestión de crisis y defensa de intereses para la UE (poco a poco) (misiones en Africa, por ejemplo).
    El tema más apremiante en este momento es la carrera armamentista. No solo se debe gastar más, sino gastar mejor y juntos, favoreciendo la adquisición conjunta, así como un complejo militar-industrial más integrado, libre de celos nacionales, porque la necesidad de llenar los almacenes vaciados por las donaciones en Kiev pondrá a prueba a las capitales. El futuro se ve sombrío.
    "El modelo europeo se basó en energía rusa barata, mano de obra china y defensa pagada por Estados Unidos", resumió el Alto Representante para la Política Exterior europea, Josep Borrell.
    En resumen, todo por rehacer. (ANSA).
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