Durante los incidentes con un grupo de black blocs, un policía fue golpeado en la cabeza por un adoquín desprendido de la superficie de una carretera y fue transportado al hospital de urgencia.
También se produjeron altercados y bataholas en Le Havre, en el norte, donde fueron detenidas ocho personas por dañar el mobiliario urbano e incendiar papeleros y material público. Ocho también fueron apresados en Rouen, Normandía, donde otras 11 personas resultaron heridas durante los enfrentamientos.
Entre ellos, una mujer que se queja de la amputación de su pulgar. Dos policías también resultaron heridos por golpes con piedras en la cabeza.
En tanto, la asociación de hosteleros y restauradores de Francia ha escrito una carta a la primera ministra francesa, Elisabeth Borne, para lanzar un grito de alarma sobre las consecuencias de las huelgas y reiteradas manifestaciones que perjudican gravemente al sector, ya duramente castigado por la pandemia y la inflación con el aumento de los costos de las materias primas.
La carta menciona huelgas de transporte, basura que no se recogió durante días en París, bloqueos de carreteras como factores que mantienen alejados a los turistas. Según informa el presidente de la asociación del sector, Pascal Mousset, en los restaurantes, en París y en las grandes ciudades, la caída de la actividad ronda el 25%. (ANSA).
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