(ANSA) - ROMA - "El hecho de que Rusia se haya retirado del acuerdo de granos solo se suma a la crisis de seguridad de los cereales. Rusia debería reconsiderar su decisión". Así lo dijo la primera ministra Giorgia Meloni en la cumbre de la ONU sobre sistemas alimentarios, que se está celebrando hoy en Roma, en la sede de la FAO; en tanto Moscú bombardea depósitos de trigo en Odessa.
"Roma se complace en albergar este evento extraordinario que el gobierno italiano presidido por Giorgia Meloni y la FAO han organizado en conjunto. Creemos que es fundamental comprometernos con un tema que afecta la vida de miles de millones de personas. La seguridad alimentaria es una prioridad para el gobierno italiano", apuntó a su vez, el canciller Antonio Tajani, dejando en claro los objetivos de su gobierno sobre la cuestión.
"Creemos que se debe apoyar la acción de Naciones Unidas en el mundo en un momento especialmente delicado en el que existe el riesgo de que millones de personas no reciban cereales de Ucrania y esperamos que al final se pueda llegar a un acuerdo para dar respuestas a personas que no están en absoluto involucradas en una guerra injusta", añadió el jefe de la diplomacia italiana, mientras Occidente apunta a Moscú, por su bloqueo al cereal ucraniano.
"Estamos convencidos de que la lucha contra el cambio climático, la investigación científica, el espacio, pueden ser acciones decisivas para hacer más fácil la vida de miles de millones de personas. Poder comer y comer bien es un derecho de todo ser humano", insistió Tajani.
"Demasiados niños siguen muriendo de hambre, parece increíble, y los países más ricos tienen el deber de llegar a los necesitados e Italia está a la vanguardia de este punto de vista -añadió-. Queremos ser protagonistas de estas jornadas de trabajo".
El secretario general de Naciones Unidas se sumó a los reclamos. "Hago un llamado a la Federación Rusa para que vuelva a la implementación de la Iniciativa del Mar Negro en línea con mi última propuesta e insto a la comunidad mundial a unirse para encontrar soluciones efectivas en este compromiso y esfuerzo esenciales", enfatizó Antonio Guterres, al inaugurar la cumbre de la ONU sobre sistemas alimentarios, organizada por la FAO en Roma.
En una videoconferencia con el vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, responsable de comercio, el ministro de Agricultura de Polonia, Robert Telus, presentó "la posición de Polonia sobre la situación actual del mercado de cereales en el contexto de las importaciones de productos agroalimentarios de Ucrania y las acciones recientes de Polonia y la coalición informal de países de primera línea".
La semana pasada, los ministros de agricultura de Polonia, Hungría, Rumanía, Bulgaria y Eslovaquia, reunidos en Varsovia, firmaron una posición común en la que pedían a la Comisión Europea que ampliara las medidas preventivas sobre las importaciones de semillas de trigo, maíz, colza y girasol de Ucrania más allá del 15 de septiembre de 2023. El documento se presentará mañana en el Consejo de Agricultura de la UE.
En tanto se registra un fuerte aumento de los precios del trigo con la escalada de las tensiones entre Rusia y Ucrania con el bombardeo de la ciudad de Odesa en el Mar Negro.
El precio del trigo blando subió un 5,66% a 737 dólares por unidad contractual de 5.000 fanegas, mientras que el trigo duro subió un 4,1% a 895,50 dólares. En ambos casos se trata de valores altos, pero inferiores a los máximos alcanzados el 26 de junio en 770,25 dólares para el trigo blando y el 17 de mayo en 902 dólares para el trigo candeal.
Un ataque con drones rusos apuntó a una infraestructura portuaria ucraniana en la región sur de Odessa y destruyó un cobertizo de granos, dijo este lunes el Comando Operativo de Ucrania para el Sur.
"Durante la noche, un ataque de casi cuatro horas llevado a cabo por drones Shahed-136 fue dirigido contra una infraestructura portuaria", dijo el ejército de Kiev en Facebook. "Se destruyó un cobertizo de granos y se dañaron los tanques de almacenamiento de otras cargas", agregó. (ANSA).