El Bundestag, la cámara baja del parlamento alemán, ha decidido que se pueden transportar hasta 25 gramos de marihuana, es decir, el equivalente a unos diez porros grandes. La ley, aprobada con 407 votos a favor, 226 en contra y 4 abstenciones al final de una polémica de años, también permite cultivar hasta tres plantas de cannabis en casa, conservando hasta 50 gramos de ellas para uso personal.
Sin embargo, parece poco probable que Alemania -con esta ley entra tras las legalizaciones decididas por Malta y Luxemburgo en 2021 y 2023 respectivamente- se transforme en algo parecido a Países Bajos, donde la marihuana, aunque ilegal, es ampliamente tolerada y vendida en mercados especializados.
De hecho, la nueva ley alemana no prevé actualmente cafeterías ni ventas minoristas gratuitas: a partir de julio solo se permitirán las 'Anbauvereinigungen', es decir, las "asociaciones de cultivo" que, sin fines de lucro, podrán producir cannabis entregándolo a sus miembros (solo adultos residentes en Alemania) hasta un máximo de 50 gramos por mes por componente, con límites adicionales basados ;;en la edad y los niveles del ingrediente activo THC. El consumo seguirá prohibido cerca de colegios y centros deportivos.
"La situación en la que nos encontramos actualmente no es en modo alguno aceptable", declaró el ministro de Sanidad (y médico), Karl Lauterbach, socialdemócrata como Scholz, denunciando la existencia de un "preocupante mercado negro criminal" al que la ley debería contribuir a luchar. .
Actualmente, existen sanciones, hasta prisión, por posesión de marihuana, ante las que la policía hace la vista gorda, especialmente en las grandes ciudades como Berlín. Sin embargo, en Alemania hay alrededor de 4,5 millones de personas que consumen cannabis, con un aumento del 100% en la última década entre los jóvenes de entre 18 y 25 años, advirtió el ministro.
La oposición democristiana (CDU-CSU) y la extrema derecha (AFD) han impugnado la ley, prometiendo apelaciones y una derogación si ganan las próximas elecciones en el otoño del próximo año. La resistencia que ya existe en el Bundesrat, la Cámara de Representantes regional, sin cambiar la ley podría retrasar su aprobación definitiva. Como recordó un diputado de la CDU: "La policía no está preparada" para hacer cumplir los límites impuestos por la nueva ley. (ANSA).
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