Tras la reciente aprobación parlamentaria de la Ley de Bases, que contempla el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI), el gobierno pretende contar con una ley que abordará cuestiones vinculadas a "normas técnicas, esquemas de certificación y H2 en redes de gas (blending)", indicaron a ANSA fuentes de la secretaría de Energía.
Esa nueva norma sería presentada en septiembre al parlamento, indicaron, pero también se buscará "actualizar la estrategia nacional sobre hidrógeno" y se trabaja para lanzarla en noviembre.
"La clave está en que la Unión Europea, en su fase 2 de cara al 2030, debe adquirir 10 millones de toneladas de hidrógeno verde en países asociados. Y ahí Argentina puede decir presente porque tiene los recursos renovables, agua y grandes superficies de hasta dos millones de hectáreas disponibles", subrayó el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo.
"Nos gustaría hacer una hoja de ruta a partir en la que podamos trabajar conjuntamente en facilitar la realización de operaciones bilaterales que permitan el 'matching' de la demanda con la oferta en la compraventa de GNL e hidrógeno renovable mediante contratos de largo plazo, fomentar y canalizar financiamiento en inversiones en la materia y que la UE pueda comprometer fondos", añadió.
Lo dijo en un reciente encuentro organizado por la sede de la Unión Europea en Buenos Aires, el Círculo de Políticas Ambientales y el CEARE, un centro de estudio de cuestiones energéticas.
Chirillo subrayó -ante la comisaria de Energía de la UE, Kadri Simson- que Argentina "va a ser un socio estratégico de esa región, en especial en hidrógeno y GNL". "Argentina será país vendedor de energías renovables que la Unión Europea requerirá como parte de su estrategia de transición energética", insistió.
El gobierno de Milei apunta a promover las ventajas para invertir en Argentina, ajusta permisos y actividades de cooperación en regímenes de comercio de derechos de admisión, asistencia técnica en evaluación ambiental, formación en capacidades e intenta mejorar la predisposición de las comunidades locales.
Sobre el GNL (gas natural licuado), Chirillo destacó los cambios normativos que permitirán aumentar la exportación y asegurar el suministro del mercado local y los desarrollos en curso de plantas para la licuación para "aprovechar la ventana de oportunidad" que implica Vaca Muerta -formación geológica de shale- en el marco de la transición energética global.
"Argentina es el segundo productor en shale gas, las posibilidades son muy grandes, pero pondremos el acento en GNL con las plantas flotantes y las fijas: están los proyectos de YPF, el de Chile y otro flotante, que están en el mediano plazo.
Con el RIGI y en 2030 facturaremos 30 mil millones de dólares al año y también van a permitir entrar divisas", completó Chirillo.
(ANSA).
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