Mattarella defiende la importancia del welfare

(ANSA) - Por Fabrizio Finzi - El presidente de Italia, Sergio Mattarella, subrayó hoy que el estado de bienestar ("welfare") es un pilar del modelo social italiano y pidió también el fin de las diferencias entre el Sur y el Norte en salud pública.
    El sistema de bienestar es "un pilar de nuestro modelo social italiano" y su carácter universalista es "indispensable", planteó Mattarella mientras un conjunto de medidas entraban en el Consejo de Ministros y el Parlamento, y se preparaban para su aprobación antes de fin de año.
    En primer lugar, la estabilidad del bienestar significa para Mattarella la base misma de la ciudadanía.
    En ese sentido, el jefe de Estado fue muy claro al señalar los riesgos que se avecinan en diversos sectores, partiendo de la falta de homogeneidad económica dentro del país hasta el mantenimiento del sistema nacional de salud, el verdadero núcleo del bienestar junto con las pensiones y con la educación.
    "No podemos permitir que vuelvan las brechas territoriales, generacionales y sociales, tanto en el ámbito sanitario como en otras dinámicas de integración social", advirtió el presidente, en un mensaje enviado al Foro "Bienestar, Italia" 2024.
    Y explicó eficazmente por qué: "los servicios, las reglas, los equilibrios alcanzados no están garantizados en abstracto, sino que requieren una continua adaptación y fortalecimiento respecto de los cambios en las demandas que provienen de la sociedad, para garantizar que los derechos indispensables sean de carácter universalista".
    El universalismo del bienestar en Italia está garantizado por la Constitución y esto explica la preocupación del presidente en un momento histórico en el que los impulsos neoliberales se están infiltrando también en las creencias de los países del sur de Europa.
    "Welfare" es una palabra anglosajona que define las políticas de asistencia típica de los países europeos, es decir, el conjunto de intervenciones y servicios proporcionados por instituciones públicas y financiados a través de ingresos fiscales, destinados a proteger a los ciudadanos de condiciones de necesidad y garantizar la educación y la atención sanitaria para todos.
    Quizás por eso Mattarella, en un momento en el que la sanidad pública en Italia está en crisis y los ciudadanos se ven cada vez más obligados a recurrir al sistema privado de salud, escribió: "el sistema de asistencia social, fruto de los principios de la Constitución y de las decisiones tomadas en el gobierno republicano décadas, constituye un pilar de nuestro modelo social, así como un rasgo esencial de la propia ciudadanía".
    Y la preocupación crece cuando las brechas territoriales amplían aún más la brecha de bienestar entre el Norte y el Sur.
    El jefe de Estado lo subrayó hablando de "brechas territoriales, generacionales y sociales, tanto en el ámbito sanitario como en otras dinámicas de integración social".
    Por lo tanto, la invitación presidencial a saber construir "innovación y planificación" es inevitable, porque solo así se podrá "implementar, en el tiempo, la dirección constitucional que coloca a la persona en el centro y que garantiza una protección social adecuada en nombre de la igualdad de derechos, para los necesitados".
    Se necesita coraje para no socavar lo que Mattarella define como "una herencia de valores cohesivos" y también "un componente significativo de la identidad de un país". (ANSA).