El Papa hospitalizado, sufre una "infección respiratoria"

(ANSA) - Por Fausto Gasparroni- - Para todos, la hospitalización repentina del papa Francisco en el Policlínico Gemelli, de Roma, donde llegó en ambulancia por "una infección respiratoria", fue un balde de agua helada.
    "En los últimos días, el Papa Francisco se ha quejado de algunas dificultades respiratorias y esta tarde acudió al Policlínico A. Gemelli para realizarse unos controles médicos", anunció por la tarde el director de la oficina de prensa vaticana, Matteo Bruni.
    "El resultado de esos chequeos puso de manifiesto una infección respiratoria (excluida la infección por Covid 19) que requerirá unos días de tratamiento médico hospitalario adecuado". "El Papa Francisco está conmovido por los muchos mensajes recibidos y expresa su agradecimiento por la cercanía y las oraciones", agregó.
    El Pontífice se había dejado ver muy sereno en la audiencia general de la mañana -al margen de las conocidas dificultades para caminar por el dolor de rodilla-, realizando el recorrido con el 'papamóvil' junto a los ya habituales cinco niños a bordo, dando animadamente su catequesis, al final bromeando y sonriendo y luego posó en la foto de grupo con los obispos. Solo parecía cansado cuando lo levantaron de la silla de ruedas para subir al papamóvil que lo llevó a Santa Marta, donde supuestamente padeció el síntoma que lo obligó a ser hospitalizado.
    Luego, solo unas horas después, el anuncio completamente inesperado a los periodistas a las 16.09 (hora de Roma) por parte del portavoz Matteo Bruni: "El Santo Padre ha estado en el Gemelli desde esta tarde para algunos controles previamente programados".
    La noticia inmediatamente dio la vuelta al mundo, con el recuerdo también de aquel 4 de julio de 2021 cuando, siempre en el Gemelli, Francesco había fue operado del colon por una estenosis diverticular.
    El resonar de hipótesis también comenzó de inmediato, con una sola evidencia en las primeras horas: esos "controles previamente programados" pronto aparecieron como un intento de no sembrar un alarmismo excesivo. De hecho, había muy poco planeado en relación al traslado al Gemelli. De hecho, una entrevista prevista con la presentadora Lorena Bianchetti tuvo que cancelarse a último momento.
    Mientras tanto, empezaba a trascender que el personal más cercano a Francesco -incluido el del dispositivo de seguridad- había sido movilizado para pasar la noche en el hospital universitario. También se supo que todas las audiencias del Papa previstas para mañana y el viernes han sido canceladas. Y desde círculos de la Santa Sede trascendió que "se ha hecho espacio en la agenda para que los controles (médicos) puedan continuar el tiempo que sea necesario".
    Ciertamente, Francisco permaneció hospitalizado en el apartamento del décimo piso, el llamado "dei Papi", que ya utilizó para la hospitalización de diez días relacionada con la operación de colon, y anteriormente donde estuvo varias veces Juan Pablo II.
    A última hora de la tarde, por tanto, se supo por fuentes médicas que ya se habían realizado todas las pruebas a las que tuvo que someterse Jorge Bergoglio. En particular, la tomografía computarizada de tórax, que dio un resultado negativo (y este elemento fue evaluado con alivio general por la comitiva médica), mientras que se monitorearía la saturación de oxígeno en la sangre, que de todos modos está bien. No habría problemas cardíacos y se le habrían hecho las pruebas respiratorias necesarias.
    La situación, según los médicos, no causaría especial preocupación. También se realizaron pruebas para descartar problemas más graves.
    Ahora el Papa permanecerá en el Gemelli el tiempo necesario, aunque se acerque la Semana Santa, con todos los compromisos pastorales, que implica. Ya se ha hecho un plan alternativo en el Vaticano para las celebraciones del Domingo de Ramos y el Triduo Pascual. Aunque la "infección respiratoria" no da excesiva preocupación, incluso en un paciente de 86 años como Francesco, se tiene en cuenta la resección de una parte del pulmón que se le hizo a Bergoglio cuando era seminarista en Argentina por una neumonía.
    Sin embargo, en los chequeos se ha constatado que el Papa, además de no tener Covid, que no tiene EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica) ni fibrosis pulmonar idiopática, patologías que pueden afectar al sistema respiratorio. (ANSA).