El papa Francisco recibió hoy a los miembros de la Guardia di Finanza (la policía financiera italiana) y destacó el rol que tienen para hacer cumplir las normas que van desde temas como el buen uso de Internet hasta la prevención del "trabajo no declarado y mal remunerado".
"Están llamados a contribuir a la justicia de las relaciones económicas, verificando el cumplimiento de las normas que rigen las actividades de las personas y de las empresas".
"Por ello, deben velar por el deber de todo ciudadano de contribuir según criterios de equidad a las necesidades del Estado, sin favorecer a los más fuertes, y combatir el uso inadecuado de Internet y de las redes sociales", prosiguió el Papa.
"Ya sea en relación con la recaudación de impuestos o en la lucha contra el trabajo no declarado y mal remunerado -este es otro escándalo- o, en cualquier caso, perjudicial para la dignidad humana, su acción es de primordial importancia", insistió Francisco.
"Y todo esto es su forma concreta y cotidiana de servir al bien común, de estar cerca del pueblo, de combatir la corrupción y promover la legalidad. Esa corrupción que se produce debajo de la mesa", manifestó el argentino Jorge Mario Bergoglio.
"La palabra corrupto recuerda el corazón roto, el corazón roto, manchado por algo, arruinado. La corrupción revela una conducta antisocial tan fuerte que disuelve la validez de las relaciones y de los pilares sobre los que se funda una sociedad.
Por tanto la respuesta, la alternativa, no está sólo en las reglas, sino en un nuevo humanismo. Refundar la humanidad".
(ANSA).
Francisco critica el "escándalo" de la precariedad laboral
A miembros de la policía financiera italiana los invita a luchar contra el trabajo mal remunerado