Oficialmente, monseñor Syukur justificó su renuncia a ser cardenal, aceptada por Francisco, con su "deseo de seguir creciendo en la vida sacerdotal, en el servicio a la Iglesia y al pueblo de Dios", según se lee en el comunicado emitido por la Santa Sede.
Pero observadores consideran más que probable que su decisión haya sido influida por el hecho de que en su diócesis hayan surgido casos de abusos sexuales a menores, que involucran también a estructuras de la Iglesia de los que es responsable la diócesis.
La prensa italiana habla de los casos de abusos sexuales que comenzaron a ser reportados en la diócesis de Bogor. Además de un caso de abuso sexual a un monaguillo en la iglesia de St.
Herculanus en Depok, Java Occidental, que se dio a conocer en junio pasado, se sospecha que un hecho similar ocurrió también en el orfanato Kancana Bejana Rohani, una casa de acogida en Depok.
El presunto autor en este último caso sería el fraile Angelo Ngalngola, quien afirmó que el orfanato estaba autorizado por la diócesis.
El obispo Syukur ya ha declarado que "los abusos deben ser enfrentados abiertamente". Sin embargo, una revista ha recopilado acusaciones de varios residentes del orfanato católico, y podrían surgir situaciones de encubrimiento.
Consultada sobre los diversos aspectos del caso, la Sala de Prensa del Vaticano indicó que no habrá comentarios ni adiciones a lo que ya se expresó en el comunicado de ayer.
En cuanto a la renuncia de monseñor Syukur al cardenalato, la arquidiócesis de Yakarta, de la que Bogor es subsidiaria, la ha descrito como una "noticia sorprendente, pero debe haber razones de peso que respetamos".
Monseño Syukur, miembro de la Orden Franciscana de los Frailes Menores, era uno de los 21 nuevos cardenales, de los cuales 20 son 'electores', que iban a ser creados en el consistorio convocado por el papa Francisco para el próximo 7 de diciembre.
Con su renuncia, el número de nuevos cardenales se reduce a 20, de los cuales 19 son 'electores'.
Syukur tiene 62 años, nació en Ranggu el 17 de mayo de 1962 y desde el 21 de noviembre de 2013 es obispo de Bogor. De 2018 a 2022 fue segundo vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Indonesia y desde 2022 es su secretario general.
La diócesis de Bogor, que abarca territorios en la isla de Java, contaba en 2022 con 94.381 bautizados, sobre una población de 20.559.829 habitantes.
El caso del obispo indonesio no es el primero de un prelado que renuncia al cardenalato después de haber sido designado. Se recuerda el caso de hace dos años del obispo belga Lucas Van Looy, salesiano.
Al final del Regina Caeli del 29 de mayo de 2022, cuando Van Looy ya había superado los 80 años y llevaba dos como obispo emérito de Gante, el papa Francisco anunció su creación como cardenal en el consistorio del 27 de agosto siguiente.
Sin embargo, dicho anuncio provocó reacciones negativas, ya que Van Looy fue acusado de haber encubierto abusos sexuales durante su ministerio. Como consecuencia, el 16 de junio se dio a conocer su renuncia a la designación cardenalicia. (ANSA).
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