Vaticano

Las pensiones en riesgo, Papa pide sacrificios

Nombra al cardenal Farrell como administrador único

Redazione Ansa

(ANSA) - CIUDAD DEL VATICANO, 21 NOV - Una serie de medidas estructurales urgentes e inaplazables para lograr la sostenibilidad del Fondo de Pensiones son necesarias en el contexto más general de los recursos limitados de que dispone toda la organización, afirmó hoy el papa Francisco.
    Además, según el Pontífice, es necesaria "una cobertura de seguridad social adecuada para los empleados actuales y futuros", y se trata de "contratar decisiones difíciles que requerirán especial sensibilidad, generosidad y voluntad de sacrificio por parte de todos".
    Así lo afirmó el Papa en una carta al Colegio Cardenalicio y a los responsables de las instituciones curiales y vinculadas con la Santa Sede, después de que "diferentes estudios" hayan demostrado que "la actual gestión de las pensiones, teniendo en cuenta los activos disponibles , genera un déficit importante".
    "Lamentablemente, los datos que emergen ahora, como resultado de los últimos análisis en profundidad realizados por expertos independientes, indican un posible desequilibrio grave del Fondo, cuyo tamaño tiende a aumentar con el tiempo en ausencia de intervenciones".
    En concreto, "esto significa que el sistema actual no es capaz de garantizar a medio plazo el cumplimiento de la obligación de pensiones para las generaciones futuras", advirtió el Pontífice.
    Francisco comunicó entonces la decisión de nombrar al cardenal Kevin Farrell administrador único del fondo de pensiones, considerando que tal decisión representa "un paso esencial para responder a los desafíos que nuestro sistema de seguridad social deberá afrontar en el futuro".
    El Papa habló de la gestión del Fondo de Pensiones, "un tema que ya está en el centro de la 'preocupación' de los sucesivos Pontífices desde su institución", como una cuestión que "le toca especialmente en el corazón, ya que tenemos que afrontar situaciones graves y problemas complejos que corren el riesgo de empeorar si no se tratan con prontitud".
    Después de haber destacado en la carta del pasado 16 de septiembre, el concepto de "déficit cero como uno de los principales objetivos que hay que perseguir con determinación para garantizar la sostenibilidad económica", con los consiguientes recortes y sacrificios, las declaraciones del Papa de hoy no son precisamente las más bienvenidas para los empleados del Vaticano, entre los cuales suena la alarma, quejándose, entre otras cosas, de no conocer el presupuesto del Fondo.
    "Los datos no son públicos -se lee en el comunicado de la Asociación de Empleados Laicos del Vaticano (ADLV)-. Sin embargo, cuando contribuimos a la gestión financiera o de pensiones, dado que pagamos con nuestras contribuciones, las cuentas deben ser consultables por todos. En el Vaticano, sin embargo, estos aspectos son en beneficio de unos pocos".
    "¿Quién certifica las responsabilidades?", se preguntó la ADLV, mientras que "la gran mayoría de los empleados del Vaticano ya se apretaron el cinturón. El recorte del período de antigüedad de dos años tendrá un fuerte efecto para muchos: incluso 20.000 euros al final de sus carreras no estaban indexados al costo de vida, mientras que el aumento de los alquileres en las propiedades del Vaticano estaba vinculado con la inflación".
    Además, "entretanto, floreció el asesoramiento en el Vaticano y los ascensos se concedieron sin ningún tipo de concurso público".
    "¿La Secretaría de Economía pensó en una reforma estructural que aumente los ingresos de la Santa Sede o en recortes que no afecten sólo al personal, cuyos salarios se reducen a los términos mínimos? -se preguntó la ADLV-.
    "¿Tuvo en cuenta la particular atención que el Papa siempre pone a las familias y a sus necesidades?", añadió.
    Los empleados, "agotados por los recortes y sobre todo por la falta de respuesta a su legítima petición de ser escuchados", creen "que ya han contribuido, al máximo de sus posibilidades, a cubrir el déficit" y siguen "esperando atentamente" por las nuevas disposiciones, reiterando el pedido de que "la ADLV sea recibida pronto para hablar de todos estos temas". (ANSA).
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