(ANSA) ROMA - El gobierno de Giorgia Meloni recibió hoy con satisfacción la aprobación en la Cámara de Diputados italiana del proyecto de ley de seguridad vial que, con penas más rigurosas, busca enfrentar el fenómeno de las muertes en accidentes de tránsito, que cada año superan las tres mil.
Aprobado con 163 votos a fav or y 107 en contra, el proyecto de seguridad vial pasa ahora al Senado, donde la mayoría oficialista garantiza su aprobación.
El proyecto prevé retirar las licencias de conducir entre 15 días a dos meses y severas multas a quienes miren el teléfono celular cuando estén al volante, circulen contramano o crucen un semáforo en rojo.
También se aplicarán sanciones a quienes no cedan el paso a peatones y ciclistas, estacionen en espacios reservados al transporte público, a la policía, a los bomberos, a los servicios de emergencia, a los servicios eléctricos y a los vehículos de carga-descarga o a personas discapacitadas. A propuesta de los alcaldes, se incrementan las multas por exceso de velocidad, que podrían superar los mil euros, con suspensión del permiso de 15 a 30 días, para quien exceda los límites dos veces al año en la ciudad.
Quien ya haya sido condenado y se encuentre nuevamente con un nivel de alcohol en sangre entre 0,5 y 1,5 deberá respetar el nuevo límite de 0 y deberá renovar su licencia con un nuevo reconocimiento médico e instalar el bloqueo de alcoholemia, el dispositivo que impide que el motor arranque si se detecta un nivel de alcohol en sangre superior a cero.
Y quien sea sorprendido conduciendo drogado ya no tendrá que encontrarse necesariamente en estado de alteración psicofísica, sino que bastará con que dé positivo en la prueba para la revocación de la licencia y una suspensión de tres años.
"Estoy feliz, salvaremos vidas, dijo el ministro de Transportes, Matteo Salvini. Es un hermoso día porque precisamente en estas horas el Parlamento aprueba por fin el nuevo código de circulación que prevé más controles, más educación vial, más rigor".
Salvini subrayó que "el proyecto prevé más rigor para aquellos que cometen errores, como el retiro de la licencia a quienes conducen ebrios o drogados, a quienes abandonan animales, a quienes utilizan teléfonos móviles".
"Además - prosiguió -, de norte a sur, estamos invirtiendo miles de millones en nuevas carreteras, estoy contento. Son días hermosos porque es absolutamente necesario reducir ese número que supera las tres mil muertes en las carreteras italianas: es una ciudad que desaparece cada año.
"Como ministro de Transportes, concluyó Salvini - quiero llegar al final de mi mandato con carreteras más modernas, más anchas, más seguras y con menos muertes en accidentes".
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