En suma, "el invierno demográfico tiene
enormes implicaciones en la sostenibilidad de nuestro sistema
social, sobre la organización de los servicios, en la
resistencia del mercado del trabajo", subrayó Giorgia Meloni,
relanzando la alarma de la natalidad y reivindicando el haber
dado con su gobierno "centralidad" al tema.
La premier, ante la platea de la Asamblea Nacional de la
CSL, lo indica entre los desafíos que se pueden "afrontar
solamente si trabajamos juntos".
Y una contribución es esperada
también por la comisión parlamentaria de investigación sobre los
efectos económicos y sociales derivados de la transición
demográfica en curso, que en las mismas horas se asentaba en la
Cámara.
La emergencia es una cuestión también europea, observó
Meloni, no concierne únicamente a Italia. Un país donde en 2023
por cada 1.000 residentes nacieron poco más de seis niños, un
récord a la baja con un descenso del 3,4% con respecto al año
precedente, según el informe Istat de octubre.
Y en 2024 la tendencia se confirma con base en los datos
provisorios de enero-julio. Las estadísticas tienen un giro
inevitable sobre la sostenibilidad del sistema jubilatorio.
"En 20 años hemos perdido 2,2 millones de trabajadores por
debajo de los 35 años y, en cambio, se duplicaron los mayores de
50 -remarcó Meloni-. Ahora, claramente el mundo del sindicalismo
comprende el impacto que esto provoca, mucho mejor que yo.
Banalmente, es un sistema que nosotros no estamos en grado de
sostener a largo plazo".
La estrategi reivindicada por el gobierno pasa a través de
"una cultura diferente de la natalidad", con el "mensaje de que
un hijo que nace es siempre es un signo "+" y nunca un signo
"-", pero Meloni aclaró que la lucha contra la natalidad "es
predominantemente una cuestión económica".
La ampliación del permiso parental y la desgravación fiscal
para las madres trabajadoras son algunas de las medidas con las
que la primera ministra quiere demostrar el cambio de ritmo
marcado desde que está en el Palazzo Chigi.
En varios lugares el gobierno ha propuesto importantes
inversiones en 2025 en este capítulo. Se trabaja en el
fortalecimiento de los centros familiares. Y la batalla a nivel
europeo para defender la asignación única, que es objeto de un
procedimiento de infracción por estar vinculada al requisito de
residencia, se considera crucial. Mientras tanto, la nueva
comisión de investigación (aprobada por unanimidad) sobre los
efectos de la crisis demográfica debatirá el tema en el
Parlamento.
En varias sedes el gobierno propuso importantes inversiones
en 2025 en este capítulo. Se trabaja en el fortalecimiento de
los centros familiares. Y la batalla a nivel europeo para
defender la asignación única, que es objeto de un procedimiento
de infracción por estar vinculada al requisito de residencia, se
considera crucial. Mientras tanto, la nueva comisión de
investigación (aprobada por unanimidad) sobre los efectos de la
crisis demográfica debatirá el tema en el Parlamento.
"Me alegra de que en una cuestión tan decisiva existan las
condiciones para un trabajo común, que supere las divisiones
partidistas y que mire hacia el futuro", declaró el presidente
de la Cámara, Lorenzo Fontana, deseando un buen trabajo a Elena
Bonetti (Acción), que presidirá la comisión, apoyada por los
vicepresidentes Enrica Alifano (M5S) y Giuseppe Castiglione
(FI), con los secretarios Davide Bergamini (Lega) y Fabio Porta
(PD).
Los 20 parlamentarios tienen la tarea de investigar los
fenómenos relacionados con los cambios y la perspectiva
demográfica de Italia, evaluando los diferentes aspectos, desde
las perspectivas de bienestar hasta los flujos migratorios
pasando por la prevención de enfermedades, y podrán hacer
propuestas para adaptar las reglamentaciones.
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