El acceso a la Plaza de los Tres
Poderes, en Brasilia, escenario del atentado de anoche
perpetrado por un lobo solitario cargado de explosivos, sigue
restringido, mientras que en la zona donde se encuentran el
Tribunal Supremo, el Parlamento y el Palacio Planalto, el
edificio presidencial , continúan las operaciones de limpieza.
Según un equipo de CNN Brasil, esta mañana también se
escucharon nuevas explosiones. La información también fue
confirmada por los bomberos. Y en una nota, la policía militar
afirma que los explosivos están siendo desactivados "uno a uno",
aunque no es posible cuantificar su número por el momento.
El mayor Raphael Broocke, portavoz de la Policía Militar del
Distrito Federal, declaró que otros artefactos explosivos fueron
encontrados en la casa del atacante, Francisco Wanderley Luiz,
en Ceilandia, a treinta kilómetros de la Explanada de los
Ministerios.
No está claro si los dispositivos son caseros o de
naturaleza más sofisticada. Pero un detalle preocupante es la
presencia de un control remoto junto al cuerpo del atacante, que
podría indicar el riesgo de otros explosivos remotos.
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